por Marilyn Gordon, CHT
Hola Gary,
Monique Chapman, madre de Juleus, de 11 años de edad, envía este mensaje. Pensé que debería compartirlo contigo.
Marilyn Gordon, CHT
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Nos estamos llevando bien, gracias a ti y a EFT. Adjunto te envío la historia de Juleus. Diez días antes de que Juleus cumpliera 10 años, fue atacado por un perro Pit Bull mientras jugaba jockey en patines en la fiesta de cumpleaños de un amigo. El perro le rasgó su espinilla izquierda y trabó su mandíbula en el hombro derecho de Juleus, dejándole 4 heridas punzantes profundas y grandes. Está por demás decir que Juleus quedó horrorizado. Las heridas físicas finalmente sanaron, pero sus heridas mentales empeoraban cada vez más.
Comenzó a tener miedos peculiares que el doctor llamaba Síndrome de Estrés post traumático generalizado. Le recetaron a Juleus medicamentos como Paxil, luego Prozac, después Buspar y finalmente Risperdal*. Ninguno de estos medicamentos pudo controlar sus miedos. Lo adormecían y lo fueron haciendo irritable, pero sus miedos crecían más y más. Tratamos incluso EMDR**, pero no le funcionó a Juleus.
*Antidepresivos, ansiolíticos y finalmente psicotrópicos. Nota del traductor.
** El EMDR es un tratamiento validado para tratar a personas que han sufrido eventos traumáticos como asaltos, secuestros, accidentes, violaciones. Nota del traductor.
Una mañana, escuché de Marilyn Gordon en KEST radio, en “Viendo más Allá”, contando una historia sobre una chica a la que ayudó en la feria. Estando familiarizada con la hipnosis, pensé ¿por qué no?, hay que abrirse a la posibilidad de EFT. Aquí la cuestión era persuadir a Juleus de que hiciera otro más de los exóticos remedios de mamá. Al proponérselo, dijo que claro, por qué no. Eso, más el hecho de que inmediatamente después de esa cita, iríamos a Disneylandia, ayudó bastante.
Mi hijo mayor y yo llevamos a Juleus a la cita. Ambos tenían los ojos muy abiertos y estaban un poco nerviosos, pero sabían que mamá no permitiría que le pasara algo a ninguno de los dos.
Marilyn nos recibió con una cálida sonrisa y comenzó inmediatamente la sesión. Observé como trabajaba con Juleus, y el miedo se le desprendía mientras avanzaba el ejercicio. Pero mi ego decía: “Juleus, si no funciona no importa, puedes decirle la verdad a mamá”. Juleus dijo: “La verdad es que funciona, mamá”. Marilyn hizo una cinta para que Juleus se llevara a casa y me dio un curso intensivo de esta técnica. Le dimos las gracias y nos fuimos a Disneylandia (por cierto que sin medicamentos)
Al segundo día en Disneylandia, un enorme bicho nos visitó a la concurrida zona de picnic donde estábamos almorzando. Este bicho ocasionó un éxodo masivo en esta zona y la gente gritaba y gritaba. Juleus comenzó de inmediato su tapping y se calmó un poco. Cuando terminaba por tercera vez su tapping, ya no tenía miedo alguno y pudimos quedarnos ahí para terminar nuestro almuerzo. Pudimos disfrutar del viaje sin medicinas y no la hemos necesitado desde entonces.
EFT es verdaderamente un milagro. Agradezco a dios por la técnica y a Marilyn por habérnosla enseñado.
Monique Chapman, tal y como fue escrito a Marilyn Gordon, CHT.
Traducido por: Dres. Carlos y Bety Rubio
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