Aquí tenemos una idea de sentido común de Sejual Shah, del Reino Unido, con la que todos salen ganando.
En este artículo quiero compartir ideas y consejos con otros terapeutas de EFT sobre cómo presentarse ante las organizaciones sin ánimo de lucro y ofertarles la realización de Talleres Compartidos de EFT para Grupos. Incluyo la palabra “compartir” en el título porque todo el mundo participa de los beneficios aunque no se esté trabajando en los asuntos personales. De mi experiencia personal, consiguiendo que las organizaciones no lucrativas acojan un taller y paguen al terapeuta, sé que es una manera de difundir los beneficios de EFT a públicos más amplios de los que normalmente encontrarían esta terapia por casualidad o tienen medios económicos para permitirse trabajar con un terapeuta.
Yo he estado dirigiendo Talleres Compartidos de EFT para Grupos a precios económicos como parte de mi trabajo habitual. He tenido importantes éxitos, incluyendo la completa resolución de los problemas de algunos de los participantes así como la mejoría de todos ellos. También he visto incrementarse el número de personas que venían a seguir trabajando con EFT después del taller tan sólo proporcionando un documento de dos páginas sobre Cómo Hacer Tapping así como la oportunidad de volver a futuros talleres.
Recientemente, me dirigí a un centro de mujeres cercano a mi zona para ofrecerles un Taller de EFT. Fue un gran éxito tanto en el número de personas que estaban interesadas como en el de resultados para los asistentes. Estuvimos muy cerca de llenar el local, tanto que el personal estaba gratamente sorprendido por la novedad del método.
Posteriormente recibí buenas aportaciones económicas del centro y del ayuntamiento para dirigir regularmente una vez al mes un Taller Gratuito de EFT. Se han convertido en actividades regularmente ofertadas por el centro y algo de lo cual yo disfruto debido a la oportunidad de ayudar a personas en circunstancias a menudo muy difíciles.
Aquí tienen algunas sugerencias para otros terapeutas sobre cómo conseguir que te acepten los talleres y cobrar por tu tiempo.
1. Encuentra un centro de mujeres, una asociación o un club. En el Reino Unido los ayuntamientos locales ofrecen clases para grupos particulares que necesitan apoyo.
2. Haga algunas averiguaciones en cuanto a si su clase cabría en otros programas que el centro esté ofertando. El centro en el que yo trabajo ofrece programas educativos sobre salud, accesibilidad a beneficios sociales, violencia doméstica, terapias complementarias, duelo y ejercicios. Tendrá mayores probabilidades de que acepten su proyecto si les ofrece un taller relacionado con otros programas similares en el campo de la educación o la auto-ayuda.
3. Llame a su Taller Compartido de EFT para Grupos algo así como “Taller de introducción para el control del estrés”. Eso dejará claro rápidamente que tu trabajo está dirigido a una audiencia no familiarizada con las terapias de meridianos. Elija un nombre que sea lo bastante amplio como para atraer a muchos tipos de personas. El control del estrés es muy bueno porque mucha gente tiene este problema. Si el centro tiene a una persona que ya se ocupa de estos asuntos, trate de buscar un título diferente para llegar a ellos de otra manera. Por ejemplo, ‘Terapia de apoyo para afrontar las preocupaciones laborales’ o ‘Seminario sobre técnicas de alivio del dolor’. A no ser que usted sea lo suficientemente experto y seguro en el manejo de grupos de personas con asuntos más graves (por ejemplo violencia doméstica) no ofrezca al centro un taller sobre esa cuestión. Usted necesita ganarse la confianza del centro y de las personas que asistan a los talleres tanto en la propia terapia como en sus conocimientos para dirigir grupos antes de permitirse entrar en asuntos más complejos. Con el tiempo, puede que le inviten a trabajar con ese tipo de grupos.
4. Aproxímese al centro primero de forma telefónica para tener una idea sobre sus intereses. Probablemente después será necesario enviarles una carta para demostrarles su profesionalidad, pero la llamada telefónica le ayudará a aprovechar al máximo su tiempo y él del centro. Usted podría ofrecer un taller previo para observar el interés que pueda haber y la respuesta con la idea de establecer posteriormente un programa regular si es aceptado.
5. Sea profesional en su toma de contacto cuando les envíe una carta. Refiérase a su oferta como una propuesta, y sea claro con lo que usted espera conseguir. El personal que dirige el centro puede que no esté familiarizado con EFT, así que explíqueles de manera sencilla qué es, sobre cuáles asuntos se puede aplicar, cuáles son los beneficios que se pueden conseguir y cómo se aplica en la práctica. Explique cómo piensa dirigir el taller, qué tiempo va a emplear (dos horas es lo correcto) y ofrezca pedirle a los participantes una evaluación personal sobre el taller.
6. En la carta ofrezca información sobre su preparación, seguros y la experiencia que usted tiene en dirigir talleres grupales. Dependiendo de las leyes vigentes en su país o las normas de cualquier colegio profesional del que usted sea miembro, puede necesitar un seguro para ofrecer terapia de grupo. Incluso aunque no exista ese requisito, tener un seguro demuestra cuan en serio se toma usted su trabajo y lo profesional que es. Además puede sumar puntos adicionales a su favor. Incluya copias de sus certificados sobre su terapia y sus seguros como parte de la información. Si es relevante, explique que el centro puede encontrar más información sobre usted y su trabajo a través de su página Web. A menos que usted tenga claro cómo desea cobrar por su dedicación, deje ese asunto como una cuestión abierta para ser discutida posteriormente.
7. Como su primer taller puede ser entendido como una prueba para sí mismo, tal vez pueda conseguir que los asistentes paguen parte de sus honorarios, aunque las cantidades sean pequeñas, quizá puedan cubrir los costes del viaje y los gastos administrativos. En aquellos lugares donde su taller sea un éxito, puede conseguir que el centro financie su próximo trabajo, cobrando algo más. Poniendo precio a su tiempo, no importa la cuantía, le ayudará a que su trabajo sea aceptado en general. Trabajar gratis no siempre está valorado lo suficiente, allá donde usted se valore a si mismo, encontrará un mayor nivel de interés en su trabajo y un mayor compromiso de los demás para investigar lo que EFT puede proporcionarles.
8. Marketing: yo diseñé mi propio cartel y obtuve ayuda del centro para publicitar mi taller. También hice mi propia campaña “boca a boca” por la zona.
9. El taller: siempre suelo emplear el mismo formato en todos mis Talleres Compartidos. Comienzo con una pequeña explicación sobre quién soy, si hago esto, estoy comenzando a ganarme su confianza y empatía. Realizo una introducción de 20 minutos sobre lo que es EFT, lo que se puede conseguir y ofrezco un resumen sobre el aspecto más mecánico del tapping. Empleo el método reducido. También suelo explicar que mi papel es facilitar el taller ya que la habilidad para conseguir resultados con EFT está en preguntar, analizar y jugar con las palabras – lo que usted y yo conocemos como El Arte de Enseñar. Entonces empleo la mayor parte del tiempo en desarrollar EFT comenzando con el tapping y la respiración contenida para conseguir que los participantes consigan resultados tangibles antes de cambiar a otro tema que vaya surgiendo en el grupo.
10. Mantén el grupo “a salvo”: las mujeres que asisten a mis grupos están a menudo sometidas a un fuerte estrés en la mayoría de las facetas de su vida. Empleo técnicas específicas para realizar un trabajo “seguro” y tranquilo. Ya que existe el riesgo de que si una persona rompe a llorar o se altera, esto pueda afectar a todo el grupo. Mi objetivo es que la experiencia sea completamente tranquila y segura dentro de lo posible dando a cada persona el suficiente espacio como para que libere sus emociones negativas.
11. Una técnica que suelo usar para mantener el ritmo de trabajo “a salvo” es llevar una caja grande de cartulina y pedir a las mujeres que “vuelquen” su estrés dentro antes de comenzar el taller. Generalmente antes de llegar a mi destino tengo un largo y estresante viaje en coche, así que siendo totalmente honesto podría decirse que tengo que usar la caja también como si fuera una válvula de escape para manejar la tensión que yo mismo he experimentado esa mañana. Esto puede aliviar cualquier renuencia que los participantes puedan sentir porque les parezca tonto hacer esto. Animo a las mujeres a visualizar o fingir mediante el acto en sí, que ellas vierten toda su tensión en la caja. Entonces cierro la caja y la llevo a un rincón de la habitación. Esto alivia la presión de cualquier angustia escondida, antes de que comencemos a hacer tapping. Una vez que el grupo está cómodo con EFT y se están consiguiendo resultados tangibles y medibles (usando las medidas del nivel de intensidad en una escala de 0 a 10) y es posible hacerlo así, invito a los asistentes a rescatar uno de los asuntos que previamente ellos habían dejado en la caja. Este acercamiento también asegura que las personas no tratan de trabajar sobre todas las cuestiones a la vez o saltan de una a otra antes de haber resuelto la anterior.
12. Otra medida de seguridad que uso es dejar claras dos normas desde el principio. La primera es que cualquier cosa que se hable en el grupo se quedará confidencialmente en el grupo, por respeto de unos a otros. La segunda es que las persona pueden contar, o no hacerlo, las cosas que deseen sobre su problema y siempre podemos trabajar tangencialmente sobre otro asunto sensible. Como los asistentes saben dónde están los límites de su seguridad, a menudo se sienten confortables para expresarse. Por consiguiente muchos se sienten “a salvo” para hablar sobre sus problemas y así poder trabajar con ellos. Además un gran sentido de compañerismo surge entre las mujeres. Se sienten tranquilas pensando que las demás pueden haber experimentado situaciones similares y ellas no son las únicas que han hablado en alto de sus problemas. Esto, gracias al alivio de la angustia que consigue EFT, ayuda a aumentar su autoestima. Aquí es donde el elemento de “compartir” de mis Talleres Compartidos de EFT se hace presente.
13. Forma de evaluación: es importante ofrecer al centro evidencias sobre la eficacia del taller. Elaboro un cuestionario en el que se hacen preguntas relacionadas con la edad de los asistentes, si han encontrado el taller lo suficientemente informativo, si he sabido comunicarme con el grupo, si el horario escogido para el taller satisfizo sus necesidades, si la calidad de folletos proporcionados estaba bien y si ellos asistirían a otro tipo de taller.
14. Informe de autoevaluación: Elaboro un informe para el centro donde explicó lo que yo he intentado conseguir y los resultados que he alcanzado durante el taller y conjuntamente evaluamos estadísticamente los resultados, ya que esto también les proporciona conclusiones a ellos.
El trabajo que hago en el centro de mujeres es a menudo muy extenuante debido a las cuestiones que se abordan, pero es un trabajo muy provechoso. Espero que otros terapeutas encontréis un modo de trabajar con centros municipales locales y también algún método para que valoren vuestro trabajo.
Con mis mejores deseos,
Sejual