Por Bernice Vergou, EFT-ADV

Querido Gary,

He usado EFT personal y profesionalmente durante cinco años. Tuve la oportunidad de llevar EFT a Alemania hace dos años, donde trabajé para un doctor que conozco, en una clínica de cáncer de terapia natural. Obtuve tanta experiencia ahí que ahora la mayoría de mis pacientes son de los que tienen enfermedades serias. El uso de EFT en este campo es increíble – sé de muchos casos que tienen una recuperación completa.

Exitosa recuperación de cáncer usando EFT

PUNTOS PRINCIPALES – Paciente femenina, 38 años de edad: La paciente primero tuvo éxito con un problema físico (un sangrado se detuvo en 24 horas). Esto a ella le dio confianza para continuar haciendo tapping. Fui graduando el tapping al nivel de la paciente, acercándome cuidadosamente al problema de raíz, por ejemplo: Aunque definitivamente no puedo hablar de eso… luego, Aunque todavía no puedo hablar de eso… entonces, pequeños incrementos cada vez, dieron buenos resultados.

Esta paciente vino conmigo unas semanas después de haber sido diagnosticada con el cáncer uterino en la etapa 3. El sangrado abundante la obligó a buscar consejo médico. Le recomendaron que se sometiera de inmediato a una histerectomía completa.

La paciente conocía muy bien la agricultura biodinámica, por lo que eligió retrasar 3 meses la operación, durante los cuales buscaría otras opciones. Sus doctores, aunque no estaban de acuerdo con su decisión, accedieron a darle el período de 3 meses antes de la cirugía.

La paciente tomó el tratamiento Breuss de ayuno a base de Jugos (jugos orgánicos y tés de hierbas durante 6 semanas). Le preocupó que el sangrado continuaba.

Ella tenía 4 niños (de 15 a 9 años) y un historial de depresión post-parto después de su segundo hijo. Su hijo más pequeño nació con un hemangioma subcutáneo severo y requería tratamiento médico continuo.

En la primera cita conmigo, le comenté que un factor que contribuía a su cáncer uterino podría ser el problema de salud de su hijo más pequeño. Basé mi opinión en la experiencia que adquirí cuando trabajé hace dos años en Alemania en la clínica de terapia alternativa de cáncer. Cuando estaba en el extranjero, también asistí a la conferencia en Londres titulada «Lo que los Doctores no te dicen» y ahí observé el trabajo del Dr. Hamer, quien cree que en cada caso de cáncer hay un trasfondo de un trauma emocional no resuelto.

Ella asintió con la cabeza, reconociendo que el cáncer podría estar conectado al trauma de su hijo más pequeño, y al mismo tiempo puso sus manos frente a su cara en señal de defensa, sacudió la cabeza y dijo enfáticamente, «¡Todavía no puedo hablar de eso!»

En otras palabras, la situación era todavía tan traumática que ni siquiera podía pensar en ello sin estresarse. (Después explicó que cuando una trabajadora social en el hospital le sugirió que necesitaba hablar de la situación, tuvo una depresión, y no quiso arriesgarse a que se repitiera).

Por esto, le sugerí que hiciera tapping diario durante una semana, usando la frase de preparación «Aunque no puedo hablar de eso (palabras textuales) me amo y me acepto, sin juzgarme. También estuvo teniendo abundante sangrado, lo que la dejaba exhausta, por lo que le sugerí que hiciera tapping para «Aunque no puedo detener este sangrado y siento como que la fuerza de mi vida se me está yendo, amo y acepto que mi cuerpo, en su sabiduría, se encargue de detener esto por mí» (u otra frase que funcione para esto).

¡El sangrado se detuvo al día siguiente! Una semana después me contó que «todavía no podía hablar de eso». Por lo que le dije, está bien, ahora haz tapping para «Aunque TODAVÍA no puedo hablar de eso…» y ella lo hizo.

Una semana después de esto, ella cautelosamente dijo, «Esta semana he sido, de hecho, capaz de pensar en esto sin llorar…» por lo que le dije, «Bueno, mientras piensas en esto vamos haciendo tapping para ello».

Ella estaba acostada sobre la mesa de masaje, y tenía un tratamiento de terapia magnética, e inmediatamente empezó a llorar incontrolablemente, entonces le pedí permiso e hice tapping en ella. No fue necesaria la frase preparatoria ¡porque la emoción estaba ya expuesta en ese momento! Se calmó después de unas cuantas secuencias de tapping, y lloró de nuevo, esta vez por su falta de apoyo en el momento de la crisis.

Continué haciéndole tapping, y me dijo que cuando nació su cuarto hijo tenía otros 3 niños pequeños y su esposo, para mantener financieramente a la familia, se fue a trabajar como piloto de un helicóptero. Se sentía aislada y una carga para los amigos, quienes tuvieron que cuidar de los otros niños mientras ella estaba en el hospital con el más pequeño. En pocos minutos esto fue liberado, y la relación con su esposo e hijos se hizo más cercana como resultado de la liberación de este trauma.

Esta señora continúa con EFT en casa, una dieta sana y un tratamiento de desintoxicación. Cuatro meses después de que empezamos a trabajar juntos, asistió al hospital local de exámenes patológicos (legrados-raspados de la pared uterina) y fue declarada libre de cáncer para su tranquilidad y la sorpresa de sus doctores, quienes estaban seguros de que todavía necesitaba cirugía.

Un mes después, este reporte fue firmado y verificado por la paciente, para dar permiso de que su historia fuera compartida con otros para poder asegurar que puede lograrse una completa recuperación, sin la intervención de cirugía, quimioterapia o radiación.

A continuación: después de escuchar que la paciente había sido dada de alta por su doctor, le ofrecí algunas sesiones gratis. Ella en ese momento estaba empacando porque se iba a vivir a otro estado. Se rió y dijo que le cuenta a toda la gente que «¡Bernice la indujo a hacer tapping por… (su niño)!» Entonces me dijo que cuando manejaba hacia mi clínica para su tercera sesión, había decidido que nunca iba a hacer tapping por lo de su hijo, porque los recuerdos eran muy dolorosos, ¡pero estaba muy contenta de haberlo hecho!

Hace ya dos años que esto sucedió. La paciente me llamó hace un mes para seguir en contacto, y todavía tiene una excelente salud.

Bernice Vergou, EFT-ADV

Traducido por Lourdes Sánchez Torres Escribir a Lourdes