Hola a Todos/Todas,

Uno de los usos más prácticos de EFT es disminuir las ansias por las sustancias adictivas (todo desde el chocolate hasta la heroína). En este caso Ted Robbins lo utiliza con éxito para las ansias de su cliente por un cigarrillo.

Por Ted Robinson

Hola Gary,

Aquí tienes un artículo sobre cómo ayudar a alguien que quiere fumar debido a su ansiedad por encontrarse en la cárcel. Como ya sabes, soy abogado defensor y durante una primera reunión con la familia de una posible clienta, el hermano del la clienta vino a mi oficina para contratar mis servicios. Mientras me contaba todos los detalles del caso, el hermano me dijo que acababa de visitar la cárcel en donde se había reunido con su hermana y se había enterado de todos los detalles del caso.

Mientras me hablaba sobre tener que acudir a la cárcel para encontrarse con ella, se puso muy nervioso y ansioso y explicó que cuando se cerraron las puertas de la cárcel estaba muy disgustado porque siempre había tenido miedo de encontrarse detrás de rejas.

En cuanto terminó de relatarme su visita a la cárcel, empezó a disculparse sin explicar el porqué. Los otros miembros de la familiar me contaron que tenía que salir para fumarse un cigarrillo y calmarse debido a lo nervioso que se había puesto.

En ese momento, le reté suavemente a que intentara una técnica sencilla que utilizo a menudo (EFT) y ver si aun tenía ganas de salir a fumar. Asintió y empezamos con la Frase Preparatoria diciendo, Aunque realmente necesito fumar mi cigarrillo, me amo y me acepto de todas formas. Bien, como ya puedes imaginarte, hubieron algunas risas mientras lo repetía y algunas más cuando propuse, Aunque tengo que fumarme este cigarrillo ahora mismo por cómo me he sentido al entrar en esa cárcel hoy, me acepto de todas formas.

Entonces hicimos tapping por todos los puntos de la secuencia abreviada y diciendo frases como, Tengo que fumarme este cigarrillo… Estaba tan nervioso cuando estaba en esa cárcel… Siempre he tenido miedo de que algún día acabaría en la cárcel y hoy lo he hecho… Aunque solo estaba de visita me sentía como si fuera yo el que estaba encarcelado…

Al finalizar una corta ronda de tapping le pregunté si aun quería salir a fumarse el cigarrillo. Tenía aspecto de estar muy relajado y dijo, “No, ¿pero podrías hacer eso de nuevo? Le pregunté por qué y me dijo que no solo se le habían quitado las ganas de fumar, sino que estaba tan relajado que le parecía que podría dormirse.

Siempre es una experiencia asombrosa cuando ves a alguien que ha sufrido un miedo durante toda la vida (en este caso de la cárcel) y lo proyecta sobre otra cosa (su cigarrillo) y conseguir un alivio total de ambas en un periodo de tiempo tan corto.

Sinceramente

Ted

Traducido por Vera Malbaski Escribir a Vera

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