Hola a todos;
Todos los golfistas del planeta querrían tener un swing mejor. Algunos golfistas trabajan en esto permanentemente pero George, un cliente de Roseanna Ellis, consiguió esto en una sesión con algunas sencillas aplicaciones de EFT para los asuntos del dolor y emocionales.
By Roseanna Ellis
Querido Gary,
George, de 50 años vino a verme para una sesión de estiramiento. Se quejaba de un fuerte dolor de espalda de un nivel de intensidad de 7 sobre 10 (7/10) que aumentaba a 10/10 cuando giraba su cintura para ejecutar el swing de golf. Este problema le provocó dejar de jugar al golf.
Se quejaba también de rigidez en el tendón de la corva con un nivel de 10/10. Bajo examen, sus tendones de las corvas estaban a 60/90 lo que era 30 grados menos de lo normal.
Se quejaba de un fuerte dolor (10/10) cuando intentaba doblarse. Solamente podía tocarse las rodillas cuando el dolor se disparaba a 10/10. Afirmaba con tristeza, “Soy un mal movimiento que huye de agacharse”. Cuando le pregunté cómo de molesto se sentía al comentar esto, me comentó que 9/10.
Hicimos tapping para:
Soy un mal movimiento que huye de agacharse,
Este dolor lumbar,
Esta rigidez en mi espalda,
El dolor bajó a 0/10 después de 15 minutos.
Hizo tapping en la rigidez de sus corvas, mientras yo realizaba técnicas de estiramiento, hasta que su alcance fue de 95/90 – de media, eso le llevó unos 15 minutos.
Todavía sentía rigidez en su espalda así que le pregunté qué había en su vida que le causaba tanta tensión en sus músculos. Me dijo “Mi trabajo me produce mucho estrés”. Hicimos tapping en el estrés del trabajo hasta que llegó a 0/10.
Entonces le pedí que girase como si estuviera haciendo el swing en un club de golf. El dolor aumentó a 6/10. Hicimos tapping en los asuntos de, Miedo a hacerme daño, Miedo a envejecer, Miedo a no ser capaz de jugar otra vez.
Continuamos haciendo tapping después de cada intento de swing a la derecha y a la izquierda hasta que alcanzó la total libertad de movimiento sin dolor.
Al final de la sesión de una hora tenía un grado de movilidad total en sus corvas. Podía ejecutar un swing completo a la derecha y a la izquierda sin dolor con un alcance del 100%. Podía agacharse para tocar el suelo con facilidad y sin dolor.
Su tarea consistía en ir a casa para pensar y llegar a tener 40 años otra vez, y jugar al golf hasta hartarse… Sonrió y lo prometió.
Al día siguiente jugó al golf. ¡Y unos pocos días más tarde me envió el e-mail de abajo!
Hola Roseanna,
Lo siento pero casi olvido que mis dos hijos están en un torneo de golf mañana por la tarde así que tendré que cambiar nuestra cita. ¿Estás disponible cualquier otro día de esta semana?
Tengo que decirte que después de la cita de la semana pasada hice un recorrido de golf el miércoles con mi grupo habitual. Todo el mundo comentó que mi swing era muy “fluido”. Exactamente lo que esperaba lograr al ir a verte. No puedo esperar hasta nuestra próxima sesión así que hazme saber cuándo puedo ir.
Gracias,
George
Recuerdos a todos,
Roseanna
Traducido por Fernando Cantón de la Lama