Maratón personal de EFT

AHEFT

Publicado: febrero 16, 2021

Virginia Sabedra nos ofrece esta experiencia con un «Maratón de EFT» personal. Su hermana y ella hacen EFT para asuntos de peso mientras conducen el coche una hora y media. El tapping las lleva de un «sí, pero…» a otro en un viaje que desveló muchos asuntos «entre bastidores». Para mí, el sobrepeso no es un problema en o por sí mismo, sino más bien un síntoma de otros asuntos, muchos de ellos ocultos. Los maratones personales con EFT puede que sean una forma excelente de sacarlos a la luz.

Virginia fue muy amable al ofrecernos los detalles de su experiencia; posiblemente lo encontrarás de bastante utilidad.

Por Virginia Sabedra

Hola Gary:

Se me ocurrió compartir una experiencia que tuve hace unas semanas con EFT y con mi hermana. Mi hermana vino a visitarme a mi ciudad y, como yo había planeado ir a una clase «por diversión» en Oakland (a unos 158 km de Sacramento, que es donde vivo yo), le pregunté si le gustaría ir a la clase también. Ella aceptó al instante y, el sábado por la mañana, nos levantamos temprano, nos metimos en el coche y nos dirigimos hacia Oakland. En cuanto estuvimos en la autovía, le conté a mi hermana que me preocupaba estar aumentando un poco de peso y le pregunté si querría trabajar en ello conmigo. Ella dijo que le encantaría porque también era un área en la que realmente le gustaría trabajar.

Ella sabía algo de EFT. Su única experiencia fue cuando estuve en su casa el año anterior. Cuando llegué a su casa en aquella ocasión ella tenía un dolor terrible en el hombro y el brazo. No podía mover el brazo sin que le doliese. Lo primero que le pregunté fue: «¿qué te estás cargando a los hombros?». Ella se rió, y seguidamente la guié a través de EFT durante unos 20 minutos mientras su dolor y agarrotamiento se desvanecían.

Como iba diciendo, la trayectoria en coche yendo hacia Oakland era de alrededor de una hora y media. Empezamos a hacer EFT con la primera idea sobre peso que nos vino a la mente; después surgieron más, una tras otra. Abundaban los pensamientos, las creencias, las sensaciones y las ideas sobre el peso y la comida. «Esta creencia de que la comida es mala», «Esta creencia de que con sólo pasar por delante de una pastelería engordo», «Esta creencia de que cuando mayores nos hacemos más anchas nos ponemos», «Este temor de que nunca estaré delgada y de buen ver», …. “sí, pero…” tras ”sí, pero…”, nos dimos cuenta que incluso los “sí, pero…” tienen “sí, pero…”.

Después de noventa minutos de tapping, de risas, tristezas, sorpresas y revelaciones llegamos a Oakland y nos dirigimos a la clase. (Nos preguntábamos qué habría pensado de nosotros la gente en los coches que nos pasaron: dos mujeres en un coche haciendo tapping en la cara y parte superior del cuerpo a la vez que vocalizaban algo. Llegamos a la conclusión de que muy pronto será algo habitual ver hacer tapping en el coche). Por cierto, que yo iba conduciendo con mucho cuidado.

Después de una clase excelente nos dirigimos a San Francisco para cenar y después a casa, con otra hora y media de EFT sobre el peso. No te creerías la de «cosas» que surgieron al trabajar ambas con el mismo asunto. Cuando a una de las dos se le ocurría un “sí, pero…” «súper significativa», nos dábamos ánimos mutuamente con «Eh, esa fue muy buena” o «Hala, esa me ha causado un gran efecto», y por el estilo, mientras seguíamos: hacíamos tapping, liberábamos más y más, y de nuevo hacíamos más tapping. Ambas echábamos cosas en la «olla»: toda la porquería sobre el peso, la comida, las mujeres, las tradiciones, los apegos, el sacar el máximo partido, etc. Fue un proceso revelador y asombroso, que nos abrió los ojos a todas las «cosas» que nos habíamos tragado y también a todas las «cosas» que permitimos que nos endosaran.

Me estoy alargando, así que resumiré el resto.

1. Al día siguiente, tanto mi hermana como yo comentamos que nuestra cena en San Francisco había sido, en cierta forma, diferente. Disfrutamos la comida profundamente, y a la vez fue diferente. Teníamos cierta libertad, una falta de pensamientos sobre la grasa, el miedo, las calorías y todo el resto. Al mismo tiempo fuimos conscientes de la comida; tenía presencia; nos «encantó» la comida y cómo estaba preparada. Comimos de forma diferente en mente y cuerpo. No sé explicarlo bien, sólo puedo decir que tuvo lugar algún tipo de cambio.

2. Al día siguiente mi hermana se fue, concluyendo su visita.

3. Unos cuatro días después, llamé a mi hermana y le pregunté si había notado algo respecto a ir al servicio. Ella dijo que ahora que lo mencionaba, sí: no había estado estreñida. A mí me ocurría lo mismo; desde nuestra maratón iba con regularidad, quiero decir bien y con regularidad. Siempre había tenido problemas con esto; mi hermana también había tenido siempre problema con esto; y sin embargo, ambas experimentamos el cese del estreñimiento desde nuestro «maratón de EFT» (¿relacionado con el peso? En este caso yo diría que sí).

4. Mi hermana y yo estamos planificando un segundo maratón con el mismo tema para ver qué más surge y qué resultados obtenemos o dónde nos lleva. Nos damos cuenta que tenemos por liberar años y años, y generación tras generación de creencias, ideas, sentimientos y nociones viejas y gastadas.

5. Diría que en nuestra maratón liberamos meses, tal vez años, de trabajo en el tema de la falsedad, las ilusiones y la negatividad sobre el peso y la comida, Y OTROS temas relacionados que surgieron automáticamente. (De hecho, hasta el día de hoy los sigo procesando).

6. He dejado de aumentar peso. Respecto al estreñimiento, ahora voy «bien y con facilidad». Bendigo la comida que tomo espontáneamente. Pido y espero que mi cuerpo procese la comida que tomo y que deje marchar todo lo que no necesito de la forma más saludable, y estoy aprendiendo a apreciarme a mí misma de muchas formas.

7. Sé que no he «terminado» aún con mi trabajo, y me parece bien, porque, mientras trabajamos, seguimos buscando, explorando, saboreando, experimentando, aprendiendo, apreciando, sanando y viviendo.

Otra vez, este correo es más largo de lo que quería que fuese, pero tengo que decirte que esta experiencia me dio la idea de realizar maratones de EFT sobre varios temas. Hice un maratón de EFT con un grupo pequeño, en mi consulta, sobre el tema económico y fue muy bien. El consciente colectivo de dos o más personas trabajando y haciendo tapping en el mismo problema o tema ha demostrado ser muy poderoso. ¿Te puedes imaginar dónde pueden ser muy útiles estos maratones de EFT?

Gary, gracias por tu «oído electrónico».

Gracias por tu delicadeza y afecto.

Virginia Sabedra

Traducido por Ana Saval-Badía Escribir a Ana

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