En muchas ocasiones los dolores físicos esconden emociones que actúan en nuestro cuerpo como una olla a presión. En un primer momento Luis Alberto usó la receta básica para aplacar el dolor de cabeza de su clienta, pero éste regresó y entonces comenzó su trabajo de búsqueda y liberación de esas emociones, con un resultado contundente.
Por Luis Alberto Arroyo Coronado de Perú
Escribe a Luis Alberto
Quiero compartir con la gran familia de EFT el caso de una señora de 55 años que vivía con dolores continuos desde la cabeza, a la cintura.
Primero usamos la receta básica para reducir dolor de cabeza y se logró, pero a los 3 días reapareció así que probé un acercamiento diferente le pedí que cerrase los ojos y pregunté qué era lo que más le estaba molestando en este momento (obviamente no era el dolor de cabeza) me dijo que no toleraba que su hermana de 36 años esté viviendo en su casa y no sea diligente ni la ayudase en las tareas, ni aportaciones económicas. Reconoció que se sentía impotente.
Después de trabajar la impotencia vino el torrente emocional: una enorme rabia por callarse, ya que sentía reparo de decírselo.
Le pedí que nuevamente cerrase los ojos, tomase aire profundamente y lo exhalase por la boca lentamente, mientras respiraba y se tranquilizaba yo le hacia tapping en la muñeca de la mano mientras ponía el foco en eliminar los miedos, las impotencias, las cóleras.
Luego le dije que mirara una silla que tenía enfrente, cerrase los ojos e imaginara que allí estaba sentada su hermana le pedí que se volviera a conectar con esas emociones, con las cosas que no le gustaban de ella y se las dijese.
La señora soltó pura pólvora por la boca, todo lo que pensaba de su hermana, todas sus emociones y sentimientos guardados desde hacía tiempo…en el momento en el que paraba yo le hacía una ronda de tapping corta diciendo “Suelto y dejo ir este dolor, esta rabia, esta impotencia, todo miedo del pasado lo suelto y lo dejo ir”
Yo observaba que ella se iba sintiendo aliviada, de hecho me reconoció que se había quitado un gran peso de encima.
Le pregunté que si ahora sería capaz de conversar con su hermana y explicarle que para la buena armonía de la casa, todos los miembros tienen que aportar. Ella incluso comenzó a pensar opciones para sentir que ambas ‘ganaban’ como buscarle un trabajo o ayudarla a hacer empanadas y venderlas…. etc
En ese momento se le quitó el dolor que le recorría de la cabeza a la cadera.
EFT es Magia
Luis Alberto Arroyo Coronado (Perú)
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