Catherine Driscoll nos llama la atención sobre experiencias de tapping en sustitución con perros – una de ellas bastante espectacular. Le pregunté por qué parece que los perros responden tan bien al tapping subrogado y ella me dijo: “los animales son MUY receptivos a las terapias energéticas tales como la acupuntura, la homeopatía, los remedios florales de Bach, etc.
Ya que los perros están muy regidos por sentimientos, creo que por eso responden bien a las energías”. También podrá ser que el amor de Catherine por los animales ayudase en el proceso. Para mí, nuestros resultados con el tapping subrogado son la evidencia de una unidad espiritual que nos conecta a todos nosotros. Con el tiempo, podemos aprender que cuanto más metamos al amor en el proceso, mejores resultados obtendremos de nuestro tapping subrogado (o intencional).
Por Catherine Driscoll
Hola Gary
Quería compartir una “ilusión óptica” contigo. Mi Golden Retriever de catorce años, Sophie, ha tenido artritis desde que tenía seis años. Le ayudamos con nutrición, hierbas, homeopatía y acupuntura, pero todavía sigue en el fondo. La semana pasada su pata delantera derecha estaba tan hinchada que empezó a deformarse. Me hice tapping en mí misma (de forma subrogada) por su cuenta… ”Incluso aunque Sophie tiene una pata dolorosamente hinchada” e “incluso aunque Sophie tiene artritis”. No podía creer lo que veían mis ojos. La pata se desinfló como si fuese un globo dejando escapar el aire. Fue como los efectos especiales de una historia de terror pero al revés.
No confiando en mí misma que lo hubiese imaginado, Sophie fue lo bastante buena como para manifestar la pata hinchada mientras mi hermana estaba de visita. Yo volví a hacer tapping subrogado mientras que ella y mi marido miraban. De nuevo, vimos bajar la hinchazón delante de nuestros ojos.
No puedes tener prueba más positiva de que el tapping subrogado funciona. Mi hermana corrió a casa para hacer tapping para sus propios perros. Antes de irse, le hice hacerse tapping con “incluso aunque no merezco atención…” ¡Espero que estará haciéndose tapping en sí misma antes de que pase mucho tiempo!
También pensé que podríais estar interesados en el perro que traté ayer. Nials es un Bull Terrier de diez meses que se volvió epiléptico una semana después de ser vacunado. Montones de evidencias científicas que unen la epilepsia con las vacunas.
No pude conseguir que se estuviera quieto, es muy hiperactivo, así que salí a pasear con él, haciendo tapping subrogado en sus ataques, excitabilidad, daño por vacunas. Tuve una intuición, así que también hice tapping por él por la preocupación sobre su “papi y mami” preocupándose por que tiene ataques. Les enseñé a los propietarios cómo hacer tapping (parecían estar más bien sorprendidos ya que eran referencias y ¡en realidad no esperaban hacerse tapping en ellos mismos y cantar cumpleaños feliz!).
En un momento dado, estaba sentado en el suelo y el perrito se escapó hacia mí para jugar y empezó a correr y a dar saltos, y el hombre dijo que estaba a punto de tener un ataque (su mandíbula empezó a temblar, lo que era una indicación). Así que subrogadamente hice tapping en los ataques de Nials. Se calmó y empezó a roer un hueso, nada de ataques.
Los propietarios se fueron diciendo que aunque al principio lo encontraron extraño, iban a practicar el tapping. Les sugerí que se hicieran tapping por su propia ansiedad sobre los ataques, de manera que si sucedían otra vez, tuvieran menos carga emocional. Me harán saber cómo les va. El perrito tenía ataques en intervalos de entre dos y siete semanas, así que será interesante ver si aminoran. Como este perrito está con altas dosis de esteroides, sinceramente lo espero. Les aconsejé que hicieran tapping si pensaban que estaba a punto de tener un ataque y también si estaba en el medio de uno.
Con amor,
Catherine Driscoll
Traducido por Juan Carlos Vega Escribir a Juan Carlos