Iñaki Figuereido nos comparte este caso de cómo un hombre aplica EFT para un duelo intenso por la pérdida de sus dos hijas en el período de 11 años por la misma enfermedad: Leucemia. Veremos cómo, a través de EFT, pudo reconciliarse consigo mismo y volver a sentir ganas de estar vivo.
Escribe a Iñaki: [email protected]
Acude a consulta un hombre de 63 años al que vamos a llamar José -no es su verdadero nombre. Acude acompañado de su esposa e hijo menor. José se queja de fuertes dolores en el estómago que le impiden comer cualquier cosa sólida pues la vomita al poco tiempo. Llega con signos evidentes de dolor físico en ese momento que al ser valorado en la escala SUD es un 10 en la escala de 0 al 10. A la pregunta que le formulo sobre en qué le puedo ayudar él me responde: A morir
Me comenta que lleva con ese dolor constantemente desde hace más de 5 meses y que los médicos ya no saben qué recetarle, que ha tomado de todo y que nada le sienta bien. Prácticamente se está manteniendo vivo a base de infusiones de manzanilla pues cualquier cosa sólida que trata de comer, la vomita a los pocos minutos.
Como está retorciéndose de dolor comienzo con una ronda de rescate con EFT directamente sobre molestias físicas:
PK: Aunque tengo este dolor tan intenso en mis tripas, soy una buena persona y me amo y me acepto completa y profundamente
CE: Este dolor en mis tripas
LO: Este dolor tan fuertepiedras agua
BO: Este dolor en mis tripas
BN: Este dolor que es como si
me serraran por el medio
BL: Esta sierra que me corta en dos
CL: No aguanto más
BB: Me quiero morir
CO: Esto no es vida, así no se puede vivir, aunque tengo
este dolor tan fuerte en mis tripas me gustaría no sufrir más
Pasamos nuevamente a la CE: Este dolor
LO: Ya no aguanto más
BO: Ya basta de sufrir
BN: Es suficiente
BL: Estoy fatal
CL: me doy pena
BB: mi familia está sufriendo
CO: Aunque mi familia sufre al verme así, el que más sufre soy yo porque este dolor no se me va y ya es hora de descansar
Le invito a tomar una respiración y valoramos nuevamente la situación. Sorprendentemente para él, me comenta estar algo mejor, que ahora el dolor estaría en un 5/10
Le pregunto qué tipo de emoción, si es que hubiera alguna, podría estar detrás del dolor que siente en la tripa. Su respuesta es: TRISTEZA, PENA, CULPABILIDAD
Y ¿con qué situación o situaciones anteriores de tu vida relacionarías esas emociones de tristeza, pena y culpabilidad? Me comenta que su hija, la más pequeña decidió tomar los hábitos de monja, que era la niña de sus ojos y eso no le gustó; él siempre habría querido para ella que se casase, que tuviese hijos, seguir juntos, pero…, que primero, Dios se la llevó de su lado y después una enfermedad se la llevó para siempre con 23 años. Por eso estaba triste, con una profunda pena en el corazón y resentido hacia Dios por habérsela arrebatado.
Surge una abreación con ira: “A Dios no le bastó con quitármela de mi vista y llevarla a un convento de clausura donde no pudiera verla, sino que se la llevó a su lado”.
Comenzamos nueva ronda en silencio en los dedos mientras José me sigue explicando: “Y 11 años más tarde se lleva a mi otra hija, que deja un marido y una niña de 4 años” “Estoy muy dolido con Dios y con los curas, porque me dijeron que ahora mis hijas estaban con Dios” ”¿Qué derecho tiene Él a llevárselas?”
Le pregunto si además de ser creyente es practicante, a lo que me responde que ahora ya no, que desde que falleció su segunda hija hace 3 años está reñido con todo el mundo religioso y no ha vuelto a ir a la iglesia.
Le invito a tomar una nueva ronda de tapping a lo que accede:
PK: Aunque estoy muy enfadado con Dios porque se ha llevado a la “niña de mis ojos” soy un hombre creyente y me amo y me acepto completa y profundamente.
Seguimos por los puntos mencionando las palabras: enfado, tristeza, pena en el corazón, y qué derecho tiene Dios a llevárselas…
Tras la primera ronda dice sentirse algo más aliviado estando ahora su intensidad emocional en un 6/10 Recordemos que había surgido una abreación (llanto) 10/10
Continuamos una 2ª ronda haciendo algunos ajustes en las frases preparatorias y de recuerdo
PK: Aunque aún sigo molesto con los curas porque me dicen que mis hijas están con Dios, soy una buena persona y un buen abuelo y me amo y me acepto completa y profundamente.
Aunque aún estoy enfadado con Dios porque me ha arrebatado a mis dos hijas, soy una buena persona y me amo y acepto completa y profundamente.
Aunque siento todavía esta tristeza dentro de mi corazón, me doy permiso para estar bien.
CE: Estos restos de enfado que me quedan con Dios
LO: Estos restos de enfado
BO: Estos restos que aún me quedan
BN: Estos restos que me quedan
BL: Estos restos de molestia que quedan
CL: Aún sigo molesto con Dios
BB: Estoy muy dolido y resentido con ÉL
CO: Aunque aún sigo bastante enfadado con ÉL por llevarse a mis hijas, me doy permiso para perdonarle y para perdonarme por mis pensamientos hacia Dios y hacia los curas.
Valoramos nuevamente en la escala SUD, ahora es de 3/10. Le invito a beber un poco de agua, acepta, y yo también le acompaño tomando una poca.
Nueva ronda
PK: Aunque soy creyente y siempre he confiado en Dios, aún sigo molesto con ÉL porque se llevó de mi lado a mi hija Lucía y a mi hija Beatriz (nombres supuestos) a pesar de este dolor y de esta pérdida soy un buen hombre, un buen abuelo y me amo completamente.
Aunque todavía me pregunto si pude hacer algo más de lo que hice por ayudar a mis hijas en su enfermedad, creo que hice todo lo que puede y me honro pro ello.
Aunque es muy triste saber que ya no las volveré a ver, elijo recordar los buenos momentos que hemos vivido juntos y me acepto tal y como soy.
CE: Os he querido mucho hijas de mi corazón
LO: Os sigo queriendo con toda mi alma
BO: Me falta la vida sin vosotras
BN: Perdonadme si no hice todo lo que puede
BL: Me resisto a dejaros partir en paz
CL: Con la esperanza de que ahora estéis bien os dejo partir en paz
BB: Habéis sido muy buenas hijas y os quiero
BT: Me doy permiso para dejaros partir en paz y para recordaros felices a mi lado
CO: Aunque he cometido muchos errores en mi vida, he sido un buen padre y me honro por ello, porque aunque me gustaría retenerlas a mi lado, éste no es su sitio ahora, sé que ellas están bien y me honro por haber mantenido conmigo su presencia durante todos estos años. Me doy permiso para dejar partir en paz a mis hijas hacia la LUZ, quedándome tranquilo, a gusto y en paz conmigo mismo.
Le pregunto a José cómo se encuentra ahora y dice estar bien. Que siente como más ligero su cuerpo, que se le ha quitado un peso de encima y que el dolor de su tripa ha desaparecido por completo. Me da las gracias y nos fundimos en un gran abrazo.
En un seguimiento posterior, a los 10 días, me comentan tanto él como la familia que vuelve a sentirse vivo, que ahora ya sale de casa (llevaba más de 3 años sin hacerlo solo), que suele quedar con los amigos y jugar unas partidas a las cartas y, que ahora puede comer de todo. Gracias EFT!!!
Iñaki Figueiredo es Facilitador Avanzado EFT y Formador Certificado (AHEFT)
sus sitios web: www.zen-on.es
http://efteuskadi.blogspot.com