Las alergias tienen muchas enfermedades relacionadas. Así que no es fuera de lo común encontrar un cliente con alergia y también ansiedad, dolores de cabeza, la mente en un estado borroso, baja energía, asma, y una lista larga de otros malestares. Tal fue el caso con Theresa, un cliente de Deborah-Miriam Leff. Pon atención a los detalles exitosos de este caso y anota una de las preguntas que Deborah hace para profundizar la sesión. Yo hago un comentario de apoyo sobre esto dentro de este artículo.
Por Deborah-Miriam Leff
Theresa tenía muchísima sensibilidad a los químicos, y se encontraba ansiosa por no estar en control de su ambiente. Viajar era especialmente difícil para ella, y rumbo a mi ciudad ella fue expuesta a los vapores de gasolina de jet en el aeropuerto y le provocaron un fuerte dolor de cabeza y garganta ardiendo. Sus síntomas se agravaron en la habitación del hotel debido al olor de los productos de limpieza, y los humos de la chimenea de gas. Casi no pudo dormir y el siguiente día despertó con un intenso dolor de cabeza, la vista borrosa, la cara le dolía, su garganta le dolía, y también amaneció sintiendo su mente borrosa (no podía pensar claramente), y tenía asma. Sus medicamentos no le estaban proveyendo el alivio, y ella estaba fanáticamente tratando de encontrar otro hotel a donde cambiarse, pero se sentía pesimista de poder mejorar la situación.
Le conté a Theresa acerca de EFT, y estuvo de acuerdo en hacer una sesión conmigo. Partimos de la sala donde la familia estaba platicando, y nos fuimos a una habitación privada y cerramos la puerta. Le expliqué como trabajaba EFT, y le demostré los puntos. En mi estimación, ella estaba entre un 9 o 10 con lo disgustada que se encontraba, (no sólo por sus síntomas físicas sino también por haber arruinado las vacaciones de la familia con sus atenciones especiales).
Decidimos no hacer tapping por la ansiedad, porque ella parecía sentir que “Preocupación” era una amistad que la mantenía al tanto de situaciones peligrosas y alergénicas, y no quería molestarla más ofreciendo eliminarla. Así que hicimos tapping por sus síntomas físicos.
Después de una ronda el dolor de cabeza estaba mucho mejor. Después de dos rondas la vista borrosa mejoró. Continuamos haciendo tapping y, después de cómo unas cuatro rondas, todos los síntomas de alergia se habían disminuido, con la excepción del asma que parecía ser renuente, y la ansiedad parecía haber bajado a un cinco.
Le hice la siguiente pregunta, “Yo no recuerdo que tú sufrieras de asma. ¿Cuándo comenzó esto?”
Me sorprendió diciéndome. “Te voy a decir exactamente cuándo comenzó: ¡Cuándo tomé ese curso de literatura sobre el Holocausto el año pasado!”
“¿De veras? ¿Qué crees que es la conexión?”
“Enviaron a todos esos judíos a las duchas, y prendieron el gas – me ahogaba sólo con pensar en eso.”
Le pedí que fuera precisa. ¿Qué era exactamente tan terrible de todo este escenario, y me contestó con indignación, “¡Qué el mundo entero permitió que sucediera!”
Hicimos una ronda de tapping diciendo, “Aunque a nadie le importó si los judíos fueron asesinados, yo completamente y totalmente perdono al mundo por permitir que esto sucediera.” Su asma mejoró después de esto pero no fue eliminada.
Entonces le pregunté, “¿A pesar de que el mundo entero no le importó, qué en realidad fue peor?”
GC COMENTARIO: ¡Exquisita pregunta! Si hay aún algo más fundamental en la raíz del asunto de lo que estás trabajando, es muy probable que esta pregunta lo encuentre.
DEBORAH CONTINUA: Esta vez tuvo que pensar por un segundo. “Que ni a Dios le importó,” dijo en voz baja.
Hicimos más tapping y esta vez perdonas a Dios. Después de dos rondas su asma se aclaró completamente, y todos los síntomas incluyendo la ansiedad desaparecieron. Estaba jubilosa, brincó para arriba y se fue a reunir con el resto de su familia. Todos miraron hacia la puerta abierta y estaban con sus quijadas bien abiertas. Ella había llegado ansiosa, llorando, asmática, con dolor de cabeza, y sin poder pensar claramente, y ahora estaba casi brincando, brillante, y completamente libre de síntomas. ¡Todo en 40 minutos!
Durante los próximos dos días, hicimos tapping brevemente en síntomas pequeñas que regresaron, y después no volvieron a regresar por el resto de la semana. Theresa hasta ‘caló su suerte’ comiendo comidas alergénicas y se maravilló que no tuvo síntomas. Beneficios Compartidos: esa semana yo también comí comidas que normalmente las evitaría debido a los alergénicos, pero me sentía fantástica y ¡consumí alimentos alergénicos por cinco días sin ningún problema! Yo no hice nada mas que hacer tapping con ella por sus síntomas alergénicos (ni siquiera eran los mismos para mí).
Cuando Theresa partió del pueblo, ella me abrazó y me dio las gracias. Aunque no hicimos tapping por su ansiedad, ella comentó que se sentía bendita y completamente libre de su carga mental – ¡algo que no había logrado en los últimos diez años!
Continuamos haciendo tapping vía el teléfono.
Deborah-Miriam Leff, Medford, Oregon