Figen Glenco ayuda a superar la «garganta rígida» de la moderadora de una junta porque no podía decir lo que deseaba. Los miembros de la reunión siguieron la sesión y así Compartieron Beneficios, lo que propició que TODOS se condujeran de una manera libremente comunicativa. Un resultado interesante.

Por Figen Glenco, BA

Como un grupo dedicado de proveedores de servicios de curación natural y alternativa deseoso de educar a las mayorías, formamos un nuevo comité, instalado en una de nuestras cámaras locales.

Surgieron dos grandes retos para nosotros al trabajar con este evento de inauguración. Primero, el concepto con el que trabajábamos es muy novedoso y poco familiar para la audiencia a la que nos dirigíamos, para los miembros de la cámara y para nosotros. Segundo, los miembros del comité apenas se acababan de presentar y no sabían gran cosa uno de otro.

Así, yo preparé un arreglo central de Feng Shui con velas, plantas y cristales en nuestra sala de juntas para brindar calidez, armonía y balance al comité en nuestras reuniones, las cuales parecían ser armónicas y tranquilas. Sin embargo, después de cada sesión, yo percibía que algo NO funcionaba bien.

En nuestra última reunión, mientras platicábamos antes de que comenzara, la directora comentó que tuvo un sueño terrible la noche anterior y que de alguna manera estaban involucrados los miembros del comité. Le pregunté si esto había generado algún efecto físico en ella, y me dijo que se despertó con rigidez en la garganta, de modo que le volví a preguntar si había algo que ella deseara decir pero que no pudiera.

Ella sonrió. Le pregunté si desearía que la ayudara brevemente con EFT, y me contestó que sí. Como no queríamos tomar mucho tiempo del que dedicaríamos a nuestra reunión, comencé directamente con EFT en vez de explicar qué es y cómo funciona. Mientras los demás miembros observaban, empezamos con la frase inicial después de registrar su nivel de intensidad en una escala del 0 al 10.

Hicimos el golpeteo tres veces para: «Aunque reprimo lo que quiero decir por el miedo de herir a los demás…». Y realizamos la técnica en cuanto a este miedo. Después del primer ciclo de tapping, su intensidad de miedo bajó de 5 a 3 sobre 10. Luego trabajamos en este miedo nivel 3, que lo disminuyó a 1 de 10.

Después empleamos las siguientes frases de inicio: «Yo me amo y me perdono a mí misma por no ser capaz de decir las cosas que deseo expresar». «Yo amo y perdono a todo aquél que me convence de no decir lo que quiero decir». «Escojo tener la capacidad de decir lo que deseo sin herir los sentimientos de los demás».

Después de este ciclo, ella inició la junta en forma oficial, y libremente comenzó a decirnos lo que pensaba. Lo que siguió fue sorprendente: de repente todos los miembros tuvieron mucho que decir. Aparentemente ellos estaban compartiendo beneficios en la medida que se desenvolvía la directora.

Yo tomé el papel de facilitador y les enseñé el método de la Vara India para Hablar* (ver más abajo), de modo que todos tuvieran la misma oportunidad de decir todas las cosas que desearan. Y como los demás tenían que escuchar hasta que uno terminara, hubo una comprensión total entre todos, sin resentimientos. Una vez que terminaron, surgieron grandes ideas y se convirtió ésta en una junta altamente productiva. ¡Gracias, Gary!

Figen Genco, BA.

Consultor Organizacional/Feng Shui/EFT

*La vara india para hablar proviene de la tradición de los indios norteamericanos. Es una forma respetuosa de expresar las ideas, especialmente cuando hay desacuerdos. Cuando se presentan asuntos de gran importancia ante un consejo, el anciano mayor sostiene la vara y comienza la discusión. Al terminar lo que tenía que decir, él entrega la vara para hablar a quien sigue en turno después de él. De esta manera, la vara se pasa de un individuo a otro hasta que todos han hablado. (De hecho, ¡nosotros usamos una de las rocas de mi arreglo de Feng Shui, ya que no conseguimos una vara!)

Traducido por Ricardo Viesca Escribir a Ricardo