¿Acaso los pensamientos de Mary sobre su deseo de tener una hija, le afectaron a su hijo prenatal? – AHEFT

AHEFT

Publicado: febrero 23, 2021


En muchas ocasiones he aplicado EFT exitosamente acerca de “temas fundamentales” que aparentemente sucedieron en el útero. Este artículo escrito por Mary Madeline Day subraya la importancia de este concepto.


Por Rev. Mary Madeline Day, EFT-ADV

El año pasado estuve leyendo un artículo publicado en el Boletín de Gary, según el cual, estando en el útero, anotamos y percibimos mucho más sobre el mundo de lo que somos conscientes. Tomamos nota de emociones y pensamientos de nuestros padres durante el embarazo. Mientras estuve leyendo, se me ocurrió una idea escalofriante que erizó los pelos en mis brazos. Aunque yo sabía esto hace varios años, de repente me acordé de mi último embarazo con total agudeza.

Yo quería tener una niña con tanta emoción que incluso me visualizaba comprando muñecas, ropa y joyas. Mi primer hijo es varón, y esa vez yo deseaba tener mujer. ¡La pareja! Cuando el doctor me informó que iba tener otro hijo, quedé desesperada. Estuve triste, pero a la vez, contenta de que mi bebé es sano, tiene todos los dedos, creciendo intacto en mi vientre. Necesitaba varias semanas para sobrepasar el sueño frustrado de tener una hija. En mis meditaciones imaginaba tener un niño sano, y un parto rápido y fácil.

Ahora, cinco años más tarde tengo un niño en su cama, con una melena rubia larga y lisa. Todos los que lo ven creen que es mujer, y cada vez que nos encontramos con una nueva persona, rápidamente le informa “soy niño”, mirando directo en los ojos. Después nos reímos entre nosotros. La única cosa que se parece femenina en él es su melena larga. Todo lo demás – su ropa y su comportamiento – gritan que es varón.

Me acordé que él nunca quiso cortarse el pelo, y pataleaba cada vez que yo aparecía con las tijeras. Pude cortar nada más que la chasquilla, y las puntas “florecidas”. Ahora, en un instante, entendí ¡por qué quería él tener su pelo largo! Me emocionó mucho darme cuenta lo que han producido mis propios pensamientos y sentimientos.

En el día siguiente, cuando mi hijo volvió a casa después de las clases, le pregunté si tenía ganas de hacer tapping conmigo. Él quiso, entonces fuimos a su dormitorio para tener privacidad. Nos asentamos cómodamente en su cama, y él repitió lo que yo dije, haciendo tapping en el punto karate:

Aunque mamá quiso mucho tener una hija…

Aunque mamá quiso mucho tener una hija. Ella se puso muy triste cuando supo que yo iba a ser varón, sin embargo, yo me quiero y acepto profunda y completamente, y me perdono a mí, y a mamá también.

Aunque mamá quiso mucho tener una hija, yo me quiero y acepto profunda y completamente, y me perdono a mí, y a mamá también.

Frases recordatorias:

Mamá quiso tener una hija

Ella se puso triste al saber que yo era varón

Está bien, ahora me quiere igual

Entonces, tengo que tener el pelo largo

Tengo que tener aspecto de niña

Ella me va querer sólo si tengo aspecto de niña

Si me cortara el pelo, mamá podría no quererme.

¿Y si me quisiera igual?

Sé que ella me quiere. Siempre me abraza y me besa

Me dice muchas veces que me quiere

No, ella de verdad quiso tener hija

Y yo no soy niña

¿Me querrá con el pelo corto?

Mi mamá me quiere, y mucho

Más que un millón

Está bien tener pelo corto, porque mi mamá me quiere, pase lo que pase

Soy su pequeño hijo y me quiere

Yo podría tener mi pelo corto si lo quisiera

Estaría bien

Ya que ahora sé que me quiere mucho, con pelo largo o corto

Mi mamá me quiere por ser quien soy, y no por mi peinado

Ella me quiere

Mi mamá me quiere y todo está bien

Oh, esto me hace tan feliz

Me siento protegido y yo también quiero a mi mamá

Repetimos las frases arriba y abajo. Después de unos minutos le pregunté a mi hijo como se sentía. Dijo que todo bien. El otro día, en la ducha, me dijo que quería tener su pelo cortado hasta el hombro. Le dije que sí le puedo hacer eso, pero también le pregunté si está seguro. Pidió tiempo para pensar. En cinco minutos más tarde me dijo que estaba seguro. Le corté el pelo hasta sus hombros derechito. El pelo largo en mi mano recibió una liga y se guardó en mi caja de tesoros.

El día siguiente yo estaba sustituyendo a una colega en el colegio de mi hijo, y me topaba con la maestra de él. Ella tenía una gran sonrisa, contándome que el peinado de mi hijo se ve fantástico, el está sentado más derecho, y total, está más seguro de sí mismo. Eso me hizo muy feliz. Mi hijo ha tenido problemas por no escuchar, y conversar demasiado durante las clases, sin embargo, después de haber practicado EFT rara vez tiene problemas, y hace sus tareas con ganas.

Para mí y mi familia EFT ha sido y es un salvavidas en mucho sentido. Ahora mi meta es compartir esta herramienta increíble con la mayor cantidad de gente posible.

Dios os bendiga

Rev. Mary Madeline Day, EFT-ADV

Traducido por Ida Miro Kiss

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