Hola Gary:

Como una recién llegada a EFT (8 meses) quería compartir una experiencia personal de EFT contigo. Temprano este verano estaba trabajando en el jardín y me atrapé el dedo en la cuchilla entre los mangos de mis tijeras de jardín. El extremo entero de mi dedo anular desde el primer nudillo hasta la punta se tornó púrpura a medida que la sangre se acumulaba bajo la piel. El dolor era por lo menos un 10 en una escala de 0 a 10. En realidad estaba luchando para no desmayarme. Me encontraba sola en ese momento y logré entrar a la casa a ponerle hielo al dedo pero descubrí que debía recostarme. El dolor era tan intenso que estaba a punto de desvanecerme. ¡De repente me acordé de EFT!

Comencé a hacer tapping.

Aunque realmente me he lastimado el dedo…

Aunque siento que me voy a desmayar…

Aunque estoy verdaderamente asustada…

Después de estas tres rondas ya no me sentía mareada y el dolor se redujo de 10 a 5. A medida que recobraba mi compostura comencé a hacer tapping, Aunque el extremo entero de mi dedo es una ampolla de sangre palpitante…

Hice tapping por dos rondas y me di cuenta que la ampolla de sangre estaba empezando a empequeñecer y el dolor se había reducido aproximadamente a 2. Seguí haciendo tapping usando Aunque todavía hay una gran ampolla de sangre alrededor de la punta de mi dedo… Después de aproximadamente 6 o 7 rondas más, todo lo que quedó fue un pequeño punto de sangre en la yema de mi dedo. El dolor había desaparecido y mi dedo ni siquiera estaba irritado.

Aunque yo ya estaba convencida que EFT es una herramienta poderosa, ¡esta experiencia eliminó cualquier duda que yo tenía sobre mi habilidad para obtener resultados! Ahora cuando alguien menciona algún dolor yo respondo «¡Podemos hacer tapping por eso!»

Saludos,

Debra Albert,

Ottawa, Canadá

Traducido por Viviana Flen Escribir a Viviana