Por Gary Craig
Hola a todos/as,
Quiero agradecer a Lori Laskowski que trajera su nariz a la formación que impartí recientemente en Cleveland.
Con todos mis respetos por Shakespeare, una nariz es una nariz es una nariz. Así que, ¿por qué le estoy agradecido a Lori por traernos la suya? Para cualquier observador externo, se trataba tan sólo de una nariz normal, pegada a una cara sonriente y una personalidad llena de vida. Sin embargo, para Lori era una fuente de incomodidad permanente. Se cayó y se la rompió hace unos 7 u 8 años y desde entonces se la había operado varias veces. A pesar de los esfuerzos por corregirla, uno de los conductos nasales permanecía parcialmente bloqueado. Ella puntuaba su malestar en un 7.
Durante la formación de EFT, pedí a cada persona del público que escogiera un malestar físico. Una persona eligió un dolor en la cadera, mientras que otros, dolor en el hombro, dolor de cabeza y malestares parecidos. Naturalmente, Lori escogió su nariz. Tras la primera ronda de EFT, me paseé por la sala y le pedí a los asistentes que puntuaran su malestar antes y después del tapping. Aunque muchos manifestaron haber experimentado un alivio importante, no fue así para Lori. Todavía estaba en un 7.
Después de una nueva ronda, fueron más las personas que manifestaron experimentar un alivio, pero no Lori. El 7 seguía siendo un 7. Llegados a este punto, los novatos en la práctica de EFT pueden llegar a la conclusión de que «Oh, no funciona en este caso.» Es fácil llegar a esta conclusión, naturalmente, porque seguía en un punto muerto, mientras que casi todos los demás manifestaban buenos resultados. Además, su nariz estaba dañada físicamente y eso era algo que ni siquiera la cirugía había podido corregir. Así que, ¿por qué no dejarlo simplemente y pasar a otra cosa?
La verdad es que me he encontrado en este punto muchas veces y, si me hubiera rendido, muchas personas nunca habrían logrado aliviarse. Son innumerables los ejemplos en los que ser persistente con EFT y jugar a los detectives arrojan resultados cuando todo lo demás ha fallado. Si queréis leer un ejemplo realmente espectacular, no tenéis más que escuchar el caso de Cathy en la cinta de audio 1B del Curso de EFT. En esta ocasión, se logró un alivio significativo utilizando EFT para un dolor de espalda continuo, causado por un accidente 18 años atrás.
Así que, a la vista de que hacer tapping directamente en el problema de nariz de Lori «no funcionaba», le pregunté acerca de las cuestiones emocionales que podrían estar causando su malestar respiratorio. Una de mis preguntas preferidas en estos casos es…
«¿Si hubiera un causante emocional de esta cuestión, cuál sería?»
Contó que existía cierta rabia alrededor del accidente original, así que hicimos tapping sobre la rabia y también sobre el perdón. Entonces, manifestó experimentar un alivio significativo, pero sólo en un punto o dos.
Por favor, tened en cuenta que aunque no logramos una de nuestras “maravillas de un minuto” y aunque el uso de EFT para su problema de nariz no funcionó con tanta rapidez como en otras personas, ALGO IMPORTANTE HABÍA SUCEDIDO. No olvidéis que el problema seguía ahí a pesar de las cirugías a las que se había sometido. Tampoco la había aliviado hacer tapping directamente sobre la cuestión física. Sin embargo, cuando abordamos las posibles causas emocionales del problema, logramos un avance significativo. Abrimos una puerta con este enfoque. No es que EFT “no funcionara”, simplemente no habíamos encontrado el camino correcto todavía.
En este punto, Lori había experimentado un alivio importante, pero no espectacular. Es un caso claro de que es posible lograr un mayor avance y de que hay que ser persistente. Sin embargo, a veces nos precipitamos al desechar este tipo de resultados «menores», por no considerarlos «demasiado buenos», y llegamos a la conclusión de que «esto es todo lo que podemos hacer.»
Ni hablar. Esta es una conclusión errónea.
En realidad, acabamos de empezar, acabamos de abrir las puertas y ha llegado el momento de ponerse manos a la obra. Hay más trabajo por hacer, más caminos que seguir. Y resulta que sabía que en la siguiente demostración haría que todo el público hiciera unas cuantas rondas de “respiración congestionada”, así que por el momento dejé a Lori tranquila. Sin embargo, al poco tiempo empezamos a trabajar en la respiración congestionada y tras un par de rondas le pedí a Lori que respirara profundamente. Todo el mundo fue consciente del cambio que se había producido, cuando manifestó que el canal nasal se había despejado y tenía una sensación de “drenaje”. El 7 inicial había bajado a un 2 Y manifestó encantada que VEÍA CON MUCHA MÁS CLARIDAD.
En las dos mañanas siguientes, manifestó que la mejora en su respiración se mantenía y que seguía viendo mejor. Había más trabajo por hacer, naturalmente, porque no habíamos llegado a cero. Sin embargo, el objetivo de estas formaciones es mostrar EFT y sus beneficios. Normalmente, no tengo tiempo de completar todas las cuestiones. Lori manifestó que todavía sentía algo de presión en la pared derecha de su nariz, por lo que le sugerí que, tras la formación, fuera muy específica con el malestar físico que todavía experimentaba. Un buen ejemplo sería….
«Aunque todavía siento cierta presión en la pared derecha de mi nariz…»
Ayer (3 semanas más tarde), llamé a Lori para hacer un seguimiento. Pensé que tal vez podríamos clarificar los aspectos restantes y llegar hasta cero con su malestar nasal. Sin embargo, resultó que había llegado a cero por su cuenta.
El alivio era completo.
Estuvo de acuerdo en grabar nuestra conversación y tras relatar cómo habían transcurrido nuestras sesiones originales, así es como se desarrolló nuestra conversación (que hemos revisado para que pueda leerse más fácilmente)…
Lori: …y tras hacer tapping, cada vez sentía una mayor liberación y podía respirar con mayor facilidad. De hecho, incluso manifesté que, por alguna razón, podía ver mejor.
GC: ¿Todavía ves mejor?
Lori: Sí, mejor aún. De hecho, solía tener problemas con mis lentillas y ya no los tengo, lo que simplemente me sorprende.
GC: A mí también, la verdad. Hace tiempo que me dedico a esto, Lori, y a veces me sigo sorprendiendo, sin saber muy bien el motivo… sólo podemos especular. Lo que quiero preguntarte, sin embargo, es ¿cómo sabes que ves mejor? ¿Qué te hace pensarlo?
Lori: Bueno, la claridad con la que veo las cosas. Creo que antes, cuando miraba las cosas a través de las lentillas, las veía con claridad, pero no con una “claridad diáfana”. Y siempre sentía alguna molestia. Pienso que las personas que llevan lentillas suelen sentirse como si llevaran maquillaje o tuvieran algo en el ojo. Y, tras hacer tapping, fue como si al pestañear lo viera todo claro. No sé si estaba relacionado con la respiración y con mi nariz (el oído, la nariz y la garganta están relacionados), pero al respirar con más claridad fue como si se agudizara mi visión, me sentía más cómoda. Simplemente me di cuenta de la diferencia de inmediato.
GC: Bueno, también podría ser que al respirar mejor entrara más oxígeno en tu sistema.
Lori: Sí, sería otra explicación.
GC: ¿Qué tanto por ciento de mejoría en tu vista crees que has experimentado? ¿Un 5%, 10% 30%? ¿Qué te parece?
Lori: Diría que mi grado de “comodidad” ha mejorado un 75%.
GC: ¿Comodidad?
Lori: Sí, el hecho de sentirme más cómoda con mis lentillas. En lo que respecta a la claridad de visión, diría que ha mejorado un 30% por lo menos.
GC: Vaya. Está bien. ¿Y esto ha sido así desde entonces?
Lori: Sí, desde que asistí a la formación.
GC: Vamos a volver a tu nariz un momento. Dijiste que al final del taller te quedaste en un «2» y, si no me equivoco, recuerdo que dijiste que una parte de tu nariz afectaba al resto….
Lori: Sí. Era como si el orificio nasal derecho restringiera el flujo de aire. Podía sentirlo cada vez que respiraba. Pero desde que hice tapping no he vuelto a notarlo, porque ya no me pasa.
GC: Bien, pasaste de 7 a 2, y el 2 restante era el lado derecho de tu nariz que afectaba a lo demás.
Lori: Así es.
GC: ¿Has llegado a 0 ahora, o sigues en un 2?
Lori: Ahora estoy a cero.
GC: ¿Estás a cero? ¿Así que has resulto totalmente el problema?
Lori: Sí.
GC: Me parece realmente impresionante.
Lori: ¡Lo es!
GC: Como puedes imaginarte, he estado al otro lado del teléfono en montones de historias como ésta.
Lori: Lo imagino.
GC: Y aún me maravillo. Ahora, volviendo a tu nariz, ¿cuándo llegaste a 0? Y, la segunda pregunta es ¿hiciste más tapping para alcanzar esta cifra?
Lori: Sí, hice más tapping para llegar a cero. No volví a hacer tapping la semana después del curso. Y entonces empecé a hacer tapping de nuevo para cualquier cosa relacionada con mi nariz. Creo que me enseñaste a entrar mucho más en detalle a medida que trabajaba para mejorarlo. Así que cada vez era más y más descriptiva.
GC: ¿Podrías poner un ejemplo?
Lori: En lugar de decir simplemente, «Aunque mi nariz está bloqueada, me acepto completa y profundamente….», era más específica y decía, «mi orificio nasal derecho, que está más cerca de mi abertura al aire, que está en la pared derecha y parece difícil –la parte superior del interior de mi nariz, no la inferior…», ya sabes, este tipo de cosas. Y entonces, pasada una semana
—probablemente unas dos semanas después de la formación, en total —bajé a cero y ya no he tenido que hacer más tapping por este tema.
GC: ¿Observaste si al tratar cuestiones tan específicas lograbas un alivio al instante o era más bien una reacción retardada?
Lori: Era retardada, más bien como si en aquel momento no supiera muy bien cómo saldría todo. Pero entonces me di cuenta (probablemente un día o dos después de hacer tapping), que ya no lo sentía.
Abrazos para todos, Gary
Traducido por Eva Llobet Martía