Después de tan sólo dos rondas fue fácil para él unirlo a sentimientos más específicos – la verdadera causa de “la presión, el cansancio y el stress”: Todo era sobre “oír a la gente”. Pero él todavía no podía conectarlo a ningún hecho, sentimiento o emoción específicas llegado a este punto, así que hicimos EFT en algunos aspectos distintos como “oír a la gente me hace sentir atontado”, y así continuamos, llegando a cero con cada uno.

Aún sin hecho, sentimiento o emoción específicas. Nada. Sólo este tinnitus constante. La presión y tensión estaban volviendo, y Mark todavía describía su tinnitus como un “siseo alto”. Aún así algo había cambiado; ahora no estaba sólo “en” sus oídos, ¡sino también alrededor de ellos! De repente, sentí muy fuerte que su tinnitus “le estaba Protegiendo”. Yo podía de hecho “ver” el casco en su cabeza.

Así que le pedí a Mark si podía darme una metáfora para su tinnitus. El dijo, “Tengo un casco en mi cabeza, que presiona en mi cráneo y parte de mi nuca”. Le pedí que lo describiera más; en su metáfora describió un precioso casco de oro con gemas insertadas, algo así como el que los jefes guerreros llevaban en tiempos antiguos. Hicimos tapping en diferentes aspectos de su casco, de su significado físico y emocional.

Entre cada ronda de tapping paramos y evaluamos su tinnitus, él informó de variaciones en su siseo alto: el siseo estaba empezando a ondular, haciéndose menos lineal, oscilando entre notas altas y más bajas. La presión en su cráneo y en su nuca se estaba debilitando, y podía sentir la presión y la tensión desapareciendo. Su metáfora también estaba cambiando, ya que su casco se estaba convirtiendo en uno más pequeño y sencillo (no más oro, no más gemas.)

Luego, inesperadamente, ¡hubo un claro y alto “crack”! Ambos paramos y nos miramos uno al otro con total estupor. Después de un momento, Mark dijo en un hilo de voz: “El hueso detrás de mis oídos acaba de hacer crack.” Este crack había sido tan alto, que por un segundo me sorprendí creyendo que “el hueso detrás de sus oídos” se había fracturado de verdad, e imaginé con gran horror una amplia grieta abriéndose a lo largo de su cráneo. Le pregunté a Mark como se sentía – dijo: «Atónito». Luego añadió: «el casco en mi cabeza está ahora mucho menos presente, y la presión que baja directa a mi nuca ha disminuido a la mitad”. Era el momento de cerrar la sesión, y él informó que su tinnitus había perdido un tercio de su intensidad.

Hicimos otras tres sesiones para su tinnitus, cada vez Mark informó de cambios positivos duraderos. En la segunda sesión hicimos un poco más de tapping para su metáfora del casco, que en realidad ya no era un casco de metal, y se había convertido en uno de cristal. Hicimos tapping hasta que se liberó por complete de él. Fue entonces cuando pudo identificar algunos hechos específicos, recordando cosas desagradables que su madre solía decirle cuando era un niño.

En las sesiones tercera y cuarta, mientras hacíamos EFT en sucesos específicos de su niñez, experimentamos los cracks de nuevo. Tan claros y altos como el de la primera sesión. Igual de impresionantes. No sé de donde venían – y probablemente nunca lo sabré – pero cada vez después de uno de ellos Mark informaba de una mejora inmediata. Hacia el final de la cuarta sesión juntos, el tinnitus de Mark había desaparecido.

Mark me llamó la semana pasada para trabajar en algunos problemas de rendimiento; dijo que había estado libre de su tinnitus desde entonces – han sido nueve meses.

¡Nunca te agradeceré lo suficiente por esta maravillosa herramienta!

Con mis mejores deseos,

Diane von der Weid

Traducido por Montse Ceide – Escribir a Montse – Ir a su sitio Web