Un caso exitoso de esquizofrenia – AHEFT

AHEFT

Publicado: febrero 24, 2021

Hace un año, Sonia Novinsky (de San Pablo, Brasil) trabajó con un paciente esquizofrénico, “Jacqueline”, en una base casi diaria.

El resultado ha sido un éxito de primera clase para este serio desorden mental… Y… fue hecho sin el uso de drogas o medios convencionales. Como ustedes verán, Jacqueline ahora vive una vida normal… libre de sus alucinaciones, anorexia y otros síntomas. Como ustedes también verán, EFT no hizo esto solo… aunque fue una herramienta fundamental. Fue EFT… MAS… la habilidad de Sonia, su cuidado y la construcción del rapport lo que trajo este bienvenido alivio.

Este artículo será de gran interés para los profesionales en esta lista por lo que Sonia ha descrito el caso en detalle.

Por favor noten que el inglés no es el primer idioma de Sonia y por eso darnos este artículo para su lectura conlleva un nivel extra de compromiso y cuidado. Para nuestra conveniencia, lo he editado levemente para su comprensión.

Por Sonia Novinsky

Jacqueline vino a mí alrededor de un año atrás. Era una mujer hermosa, en sus cuarenta y había sido diagnosticada como esquizofrénica con alucinaciones auditivas, depresión e inhabilidad para manejarse en situaciones sociales. Ahora, luego de un año, las alucinaciones se han ido y ella está bien adaptada a la sociedad. En el camino muchos otros beneficios ocurrieron, incluyendo el alivio de la anorexia y el dejar de fumar. Aquí está la historia.

Llegó en un estado muy depresivo, diciéndome: “Esta es mi última oportunidad. Y todo lo que puedo pagar son 10 dólares por sesión”. Era imposible negarse a su desesperado pedido de ayuda. Ella dijo…

Hace ya 9 años, desde que mi hija nació, que tomo Haldol, Prozac y otras medicaciones porque los psiquiatras me consideran un paciente incurable de esquizofrenia. He estado durmiendo la mayor parte del día durante estos años.

Luego de un evento traumático cuando mi hija nació caí en una depresión. Comencé a escuchar la voz de María (la madre de Jesús)

COMENTARIO DE GARY CRAIG: su psiquiatra anterior había diagnosticado esto como una alucinación auditiva.

y he tenido algunas conductas inapropiadas, incluyendo una especie de anorexia, con hospitalización. Escuché acerca de su trabajo con energía y quiero probarlo. Yo creo que esto puede ayudarme a sacarme de encima la medicación y mi enfermedad. La única razón por la que no me he matado a mi misma todavía es porque la religión me prohíbe hacerlo.”

Mi primer pensamiento fue: ¿debo hacer EFT para un cliente psicótico? Pero la desesperación que vi en sus ojos me conmovió y decidí intentar. Dijo que haría cualquier cosa para liberarse del Haldol. De hecho, había tirado las drogas y cortado la comunicación con su psiquiatra. Ella se rehusaba a tomar drogas por los efectos negativos en ella e hizo un requisito de trabajar con ella en esa condición.

Desde el primer momento me dijo que tenía un esposo y padres que la apoyaban, y también maravillosos hijos y eso la hacía sentir más culpable por ser una persona mentalmente enferma. Se quejaba de que fumaba mucho, y tener dificultades para dormir y descansar. Dijo que tenía también 30 kg más de su peso ideal, en parte debido a la medicación antipsicótica. Durante los últimos 9 años tenía miedo de manejar un auto, cosa que hacía normalmente antes de la crisis.

El último psiquiatra que había visto era muy opresivo, diciéndole que tenía una enfermedad mental incurable y que estaba obligada a tomar Haldol por el resto de su vida. Cuando llegó a mi consultorio estaba muy enojada con todos los psiquiatras y terapeutas que habían cuidado de ella durante todos estos años. No le habían dado ninguna esperanza, solo etiquetas y drogas.

Antes de investigar asuntos centrales, trabajé por algunas semanas en establecer nuestro rapport, tratando de ayudarla en su autoestima e intentando desarrollar alguna confianza en nuestra conexión. Estaba muy enojada con la clase de relación que había tenido con psiquiatras y terapeutas. Una jerarquía estaba siempre presente, y ella siempre estaba en la parte inferior. Sus objeciones acerca del tratamiento nunca habían sido tenidas en cuenta por ellos.

Acordé intentar trabajar con ella sin medicación (su elección) solamente si podíamos vernos casi todos los días y hablar por el teléfono cuando fuera necesario. Ella accedió a hacer tapping conmigo en el teléfono cuando yo se lo pidiera.

En este caso es muy importante subrayar cuan fuerte era su intención de sacarse de encima toda medicación porque la condenaba a estar fuera de una vida normal.

En este caso, aparte de EFT, el acto de rezar fue usado casi todos los días. Se compró “Un curso de milagros” y hacía sus lecciones todos los días. El primer resultado, de esta combinación de asuntos, fue que sus alucinaciones comenzaron a desvanecerse y desaparecieron completamente.

Haré un sumario de los principales tópicos que trabajamos con EFT. He aprendido mucho con Gary, por lo que hablé libremente mientras hacía tapping, de un modo que no puedo reproducir aquí, introduciendo humor e instalando nuevos sentidos y posibilidades. Ella estaba enteramente abierta a trabajar con EFT.

Comenzamos trabajando con la sensación mas aparente que ella estaba teniendo al momento en que llegó. En mi experiencia puedes empezar a trabajar con este estado, aunque no es un asunto central. Cuando esta capa ha sido alcanzada, aún si no la has aclarado del todo, deja lugar a que las memorias traumáticas se muestren. Mientras tanto obtienes la confianza básica necesaria para trabajar profundamente. Las defensas aflojan lentamente mientras la persona se calma. Al mismo tiempo recursos internos positivos se vuelven más disponibles para trabajar con ellos en asuntos más delicados. Por lo tanto comenzamos trabajando en su auto imagen y auto estima, mientras hacíamos tapping.

Aunque quedé impactada por la etiqueta de “esquizofrénica incurable” que el Dr. X me dio en su consultorio y me hizo sentir completamente desesperanzada, yo no soy esa etiqueta. Soy más de lo que la gente piensa de mí y me amo y acepto completa y profundamente.

Mientras hacíamos tapping instalé alguna reformulación acerca de cómo yo era una con ella, sin jerarquías entre nosotras, cómo estábamos juntas y no había etiquetas separándonos.

El resultado fue importante para el resto del tratamiento: ella confió en que no estaba sola y que yo estaba asumiendo un compromiso fuerte y profundo con ella. A diferencia de otros profesionales que ella había visto hasta el momento, yo no estaba simplemente usando una técnica o medicamentos o mis habilidades profesionales. A veces, cuando hay una falta de compromiso, las técnicas, títulos o medicaciones devienen en herramientas que son responsables de los sentimientos de aislamiento, separación e inferioridad del cliente.

Ella reveló que cuando su hija nació ella estaba muy enojada con respecto a algunos eventos que le ocurrieron, e hicimos tapping en ellos. El peor (que desencadenó su primer episodio psicótico) fue la imposición de su esposo para que la madre de él fuera la madrina de su hija. Desde que empezaron a salir juntos, la madre y hermanas de su esposo desaprobaron a Jacqueline y se comportaron malintencionadamente con ella. Leo, el esposo de Jacqueline no le dejó hacer ninguna elección. Casi rogó por esto, llorando y gritando. Cuando Jacqueline fue a visitar a su suegra para invitarla, la reacción de ella fue muy negativa. Ella dijo: “Acepto ser la madrina pero no voy a recibir a tu familia en mi casa”. Esto fue un evento traumático para Jacqueline

Se sintió muy infeliz, sin salida, y de esa forma tuvo su primer episodio psicótico. Se desvistió completamente en un estadio de football lleno de gente.

Hicimos tapping por ese evento, y salieron a luz muchos aspectos. Hicimos tapping por la vergüenza y culpa de no tener control sobre su conducta. Mientras estaba contando este evento hice tapping en ella. Esta es mi forma preferida de hacer tapping en eventos específicos. Este fue muy traumático pero finalmente su esposo accedió en su demanda de que su madre no hiciera el bautismo de su hija.

De esta forma, ella salió victoriosa de algún modo, pero pagó un precio alto por su “victoria”: desde este día ella cargó la etiqueta de ser una persona enferma. Después de dos meses su suegra murió repentinamente y eso le dio la ilusión a Jacqueline de tener un poder maligno dentro de ella, y eso la hizo sentirse más culpable. De algún modo Jacqueline sintió que no tenía control sobre sí misma pero desde otro punto de vista tuvo miedo de ser dueña de un poder extraordinario.

Mientras hacíamos EFT…

Aunque perdí el control sobre mi conducta aquél día en el estadio y estoy avergonzada por eso, me perdono completamente. Esta fue la manera que encontré en aquél momento para validar mi protesta contra mi suegra y las demandas de mi esposo.

Aunque hice lo que hice en el estadio y ella murió dos meses después, es solamente una creencia de que yo controlo el momento de la muerte de otra persona. Eso está en el poder de Dios, no en el mío, por lo tanto puedo estar libre de cualquier responsabilidad por la muerte o la vida de otras personas.

Jacqueline quería manejar un auto otra vez. Se sintió pronta para hacerlo, después de haberse desprendido de su episodio psicótico y sus consecuencias. Por lo tanto hicimos tapping por su miedo a manejar, primero en mi consultorio, luego en su auto.

Aunque tengo miedo de manejar un auto porque perdí el control aquél día en el estadio, y mi suegra murió justo después de eso, y mi esposo dijo que yo ya no era confiable, me acepto completa y profundamente.

Algunos aspectos de su miedo eran: miedo a perder el control, miedo a chocar el auto, miedo de atropellar a alguien en la calle, miedo de lastimar a sus hijos si chocaba el auto, miedo de matar a alguien.

Realizamos un test. Fuimos a su auto e hicimos tapping en el auto por cualquier aspecto, como “el corazón saltando muy rápido”, “no soy capaz de manejar nunca mas”, etc. Conmigo a su lado, en el auto, ella manejó por su cuenta. Luego de un par de minutos estaba muy tranquila, manejando el auto. Desde ese día maneja el auto sin problemas, con sus hijos. Sao Paulo (la ciudad donde vivo) tiene un tráfico muy peligroso y salvaje. Mucha gente normal no maneja autos aquí, pero ella ahora lo hace.

La esquizofrenia es causada a veces por dobles mensajes recibidos principalmente durante la infancia. Desde su nacimiento pudimos encontrar muchas situaciones donde los dobles mensajes eran recibidos. Al limpiar todos estos dobles mensajes a lo largo de la vida de Jacqueline, desde su nacimiento hasta ahora, era esencial permitirle ver todo de un modo distinto y crear una identidad más integrada.

Jacqueline fue la primera hija. Su padre (de origen italiano) quería solamente un hijo varón. Cuando Jacqueline nació su madre se sintió incómoda de algún modo con el hecho de que no había podido darle un varón a su esposo. Al comienzo de su vida, Jacqueline no se sintió contenida, no tenía la sensación de ser deseada. Once meses después de nacer su madre dio a luz un varón que recibió toda la atención de los padres. Jacqueline pasó la mayor parte del tiempo con una tía soltera que sentía una fuerte pasión por un sacerdote católico en aquél momento.

Hicimos tapping por todos los eventos y sensaciones que Jacqueline pudiera recordar que estaban relacionadas a su creencia de no ser querida, de no merecer amor, de ser culpable por no haber sido el varón que sus padres estaban esperando. La estrategia que encontró Jacqueline fue tratar de persuadir a su padre de que ella era suficientemente buena como un varón podría ser, y para hacerlo así se acercó mucho a su padre y eso puso muy celosa a su madre e hizo que fuera ambivalente con respecto a ella.

Aunque sentí los ojos fríos de mi madre y me sentí sola en mi pequeña cama, sintiendo que no merecía amor por no ser un varón…

Aunque me sigo sintiendo culpable por no llenar las expectativas de mis padres, cuando me decían qué importante había sido para ellos tener un varón como su primer hijo…

Aunque siento una ambivalencia en la mirada en que mi madre me mira porque ella quería un varón en lugar de mí y tenía celos de mi amor por mi padre…

Investigando más, descubrí que cuando Jacqueline tuvo su crisis, después del nacimiento de su hija, se estaba sintiendo culpable y no merecedora de tener dos hijos sanos, una niña y un varón. Esto estaba conectado con un evento específico e importante que tratamos en cada detalle.

Cuando ella tenía 18 años estaba saliendo con su futuro esposo y quedó embarazada. Como era muy religiosa y quería ser madre no quiso hacerse un aborto. Pero su esposo, Leo, dijo que se quedaría con ella solamente si ella se hacía el aborto.

Lo postergó tanto como pudo. Se sentía bajo una gran presión. No quería perder a Leo y no quería perder su hijo. Habló con sus padres y ellos estuvieron de acuerdo con el aborto. Fue una experiencia muy traumática para ella. Se sentía culpable por el aborto, enojada con Leo, que no fue con ella a la clínica, y se sentía muy incómoda con su padre. Después del aborto la recriminaba. Sus padres la apoyaban por un lado, pero del otro fueron muy severos y se mostraron muy decepcionados con ella.

Hicimos tapping por cada aspecto de esta experiencia: la sangre que vio, el lugar donde se acostó, la luz del cuarto, las preguntas que el doctor le hizo, la mirada ambivalente de su madre, el sentimiento de abandono porque Leo no estaba allí, la culpa de matar un feto de 4 meses.

Descubrimos que su anorexia estaba conectada con la sangre que vio durante el aborto.

Aunque la medicación había controlado la anorexia, fue un gran alivio comprender y limpiar esta experiencia y la compulsión que desencadenó. Desde ese día comenzó a alimentarse a si misma en una forma más balanceada y comenzó a perder el peso extra que tenía al comienzo del tratamiento.

Lloró mucho cuando hicimos tapping por esta experiencia. Enojo consigo misma, enojo con Leo, enojo con sus padres que podrían haberle dicho: “puedes tener al niño y te ayudaremos”, enojo con su padre, quien invitó a Leo a tomar un whisky para tranquilizarse, la sensación de haber cometido un homicidio, etc.

Luego de algunas sesiones trabajando en este asunto hicimos tapping por el perdonar, replanteando el hecho de que no estaba sola en lo que había hecho, simplemente era una chica enamorada de Leo y en cierto modo hizo el aborto para salvar la relación con el.

Algunas veces Jacqueline me llamaba durante la tarde, llorando, desesperada, sintiendo que algo estaba mal con ella, sintiendo que su marido no la quería, aunque siempre dijo lo contrario. Nunca tuvo una abreacción, simplemente hacíamos tapping en el teléfono y se tranquilizaba.

Vimos en aquél momento cómo el evento con la suegra disparó el trauma del aborto, culpa y enojo. Cuando su marido hizo esta segunda imposición en ella: “Mi madre bautizará a mi hija”, ella se apartó y colapsó. Desde ese día ella empezó a tener alucinaciones y a tener conductas inapropiadas. Una manifestación de esta conducta fue la pasión por un sacerdote católico (como su querida tía en el pasado), que la contuvo de un modo compasivo en la iglesia.

Desde mi punto de vista, el problema principal para Jacqueline fue no haber sido contenida desde el principio de su vida, y este hecho se repitió muchas veces, quizás porque la escritura en sus paredes era algo como esto: “No merezco ser amada, no merezco ser contenida, hay algo mal conmigo, debería ser distinta para ser aceptada, soy inapropiada, tengo extraños poderes que pueden dañar a la gente, etc.

Yo estaba sospechando, de ciertos hechos que Jacqueline me contó, que su esposo también le estaba enviando dobles mensajes. De un lado decía que la amaba, por el otro estaba indiferente, silencioso, aislado, ausente.

Trabajé con la pareja por tres sesiones y mi impresión se confirmó. Leo era muy amable pero siempre preocupado por Jacqueline de una manera distante y profesional, preguntándome si ella debería comenzar con la medicación otra vez.

Durante el año que trabajamos juntas Jacqueline tuvo más momentos depresivos. Algunas veces estaba muy acelerada, hablando y hablando, leyendo la Biblia compulsivamente, yendo a la iglesia y hablando fuerte de un modo no espontáneo. Yo la apoyé para que no tomara la medicación en todos esos momentos.

Aparte de EFT hicimos algo de terapia yoga, con ejercicios de respiración y contacto con el suelo, para tranquilizarla y conectarla con el aquí y el ahora, sintiendo las sensaciones corporales y confiando en ellas. Siendo tocada por mí de una manera muy cálida fue muy importante para ella para sentirse asentada y aceptada, trayendo esperanza otra vez a su vida.

Lo que fue interesante es que cuando aclaramos todos los aspectos de la culpa y el aborto, incluyendo la culpa de tener hijos sanos y la culpa por estar viva (solía hablar de suicidio como una forma de auto castigo), en la misma semana su ansiedad se detuvo y su voz comenzó a ser mas calma y dejó de fumar.

Como estaba mas despierta y presente para su familia, comenzó a intentar acercarse más a su marido pero él siempre fue muy distante, aunque le repitiera mecánicamente que la amaba.

Hicimos tapping en: “Aunque me siento como loca por los dobles mensajes que él me dio ayer, y quizás desde que tenía 18 años, yo me sostengo a mí misma, yo me acepto completamente y elijo no creer que estoy loca. Quizás hay algo mal conmigo…”

Le pidió a él que fuera a terapia pero no fue.

Luego de algún tiempo, a medida que estaba más centrada y no se sentía loca, comenzó a comprender cuan extraña era la conducta de su esposo. No era difícil para ella encontrar que estaba teniendo una aventura. Fríamente, él lo aceptó y le dijo que no la amaba más.

Ahora están en un proceso de divorcio. Como católica esto es muy complicado para ella, pero ha tenido la serenidad de afrontar este destino. Llevó sus hijos a terapia, fue a un abogado y preguntó por los derechos de sus hijos. Leo vino a mí y me confesó que desde que ella tenía 18 años no la amaba. Solamente se casó con ella porque le obligó a hacer un aborto y se sintió comprometido y agradecido con ella. Por lo tanto había estado enviando dobles mensajes por veinte años.

Jacqueline se puso muy enojada con él y con ella misma. Estamos haciendo tapping para que acepte la realidad tal como se muestra y finalmente liberarse de estos dobles mensajes que la habían hecho esquizofrénica por 20 años. La parte buena de esto son sus dos hijos maravillosos que son realmente especiales y están haciendo lo mejor que pueden para facilitar este momento difícil para Jacqueline y Leo.

Tenemos más trabajo que hacer. Lo importante es que Jacqueline está trabajando otra vez en su profesión. Finalmente pudo ver que su marido estuvo lejos por muchos años, aunque físicamente estaba presente.

Yo creo que la parte más importante de la terapia fue la posibilidad que me abrió para tener un profundo rapport con ella, mientras hacíamos tapping. Comenzó a creer que era una persona, no una enfermedad, y mientras esto ocurrió, su propia familia comenzó a legitimarla como una madre, una profesional y un ser humano completo. Sintió auto confianza para re-empezar su vida profesional otra vez. Por 10 años su familia y la familia de Leo consideró a Leo como el mejor marido, casi un ángel, y Jacqueline era la loca, el problema.

El sistema completo alrededor de ella cambió cuando ella cambió. La verdad se mostró y pudo ver como se sentía loca porque su marido enviaba doble mensajes desde un largo tiempo, quizás durante todo su matrimonio.

Ella está viviendo ahora sola con sus hijos. Leo se fue de la casa, y Jacqueline está muy asentada, determinada, no sintiéndose una víctima. Me dijo: “Es tiempo de dar vuelta la página: la página de mi matrimonio, mis etiquetas, mi pobre auto estima. Estoy pronta de hacerme cargo de mí y de mis hijos, y todo lo que quiero es que Leo sea feliz, tan lejos de mí como sea posible”

Algunos meses atrás me dio un largo testimonio escrito (en portugués), acerca de sus problemas y su tratamiento, confirmando algunos resultados que escribí más arriba. Su intención era ayudar a otras personas que puedan beneficiarse con su experiencia. Uno de estos últimos días completó su testimonio verbalmente. Cito sus palabras:

“Por primera vez en mi vida siento paz en mi corazón. He tenido dificultades con mi hijo y con mi marido pero no perturban mi paz. Quiero vivir como una mujer normal y como alguien que ayuda, por esto estoy rezando y ayudando como voluntaria en un hospital.

Por primera vez la gente confía en mí de nuevo. Fui elegida para la mesa directiva de mi club, y posiblemente seré una candidata para un cargo público en un futuro cercano. Estoy libre de la obsesión hacia el sacerdote. Lo sé porque fui a la iglesia a verlo y vi en el solamente al sacerdote que es. No necesito fumar ni escucho las voces que solía oír. Puedo recordar el aborto sin culpa. No podía tener un hijo por mi cuenta en aquel momento. Me siento libre de los dobles mensajes que mi esposo solía enviarme todo el tiempo, diciendo que me amaba pero excluyéndome de su vida, sus problemas y sus placeres. Me sentí pronta para hacerme cargo de mí misma, y hacerme cargo de mis hijos. Estoy viviendo cada día sin anticipar lo peor como solía hacer. La presión que había en mi corazón se fue. Pienso que traté de proteger a mi marido aceptando su doble mensaje sin protestar, poniendo la culpa en mí misma. Me siento tan saludable como cualquiera en esta vida aunque necesite terapia por algún tiempo mas.”

Yo escribía en la computadora mientras ella hablaba… Su voz era suave. Durante los peores días su voz era demasiado aguda y llena de ironía y arrogancia. Estos días sus ojos eran tiernos, su voz era tierna, su postura era elegante, su energía era amable y balanceada.

En conclusión pienso que lo decisivo fue EFT mas el apoyo que sintió porque yo pude aceptar, sin ningún juicio, su pasión y sus fantasías hacia el sacerdote, su deseo de morir, su miedo de volverse loca, y su profundo dolor, fuera de toda categoría o clasificación que pudiera separarnos.

Sonia Novinsky

Traducido por Martin Jones Escribir a Martin

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