Aquí hay 7 historias breves de éxito con EFT, tomadas de colecciones anteriores cuando EFT apenas iniciaba. Como hemos visto, EFT continúa dando resultados impresionantes para estos y una lista siempre creciente de otros asuntos.

Miedo a volar

Gary

Hola de Sharon O´Hara. He vuelto de visitar unos parientes en Roanoke, VA, y cuando cambié de avión en Phoenix, me encontré, para mi alarma, junto a una señora con un niño de un año. Para peor, la madre me sonrió amablemente y me dijo, “Lo siento, pero acabamos de volar desde San Antonio y mi hija lloró todo el tiempo.” Yo le dije que sabía algo que le podía ayudar, pero que teníamos que empezar con ella, con el miedo de la madre por su hija. La madre inmediatamente dijo que ella tenía miedo de volar de cualquier manera y que ella se anotaba a cualquier cosa.

Mientras estábamos esperando partir le hice una ronda de puntos y respiración en los puntos de EFT y despegamos. La niña y la madre estuvieron bien el viaje entero. La madre dijo que ella pensaba que esto funcionaría porque sabía que la podría ayudar si ella o la niña se ponían malas, por lo tanto no se pusieron malas. Lo que fuera.

GC comentario: Esta tendencia a darle una explicación minimizante a menudo ocurre, porque a la gente le es difícil de asimilar que este procedimiento raro que viola las creencias haya sido responsable del alivio.

Al menos yo tuve un buen vuelo.

Gary —sé que has tenido estas historias madre/ bebé anteriormente, pero todavía suena a mágico cuando te ocurre… Sharon

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Miedo a un traje de Halloween

Querido Gary,

En una reciente Fiesta de Halloween mi hija de 4 años y yo vimos un disfraz sangriento que nos hizo estremecer. Lo pasamos mal borrando la imagen de nuestras mentes y cuando llegamos a casa hicimos tapping sobre esto. (Mas tarde yo hice tapping en mí misma) y después de dos rondas ella fue capaz de dormir tranquila. Ella puede recordarlo pero sin angustiarse. Y además, ella pensó que era algo gracioso…

Paz

Jody Pignolet

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Miedo a las olas del océano

Querido Gary,

Mi experiencia favorita de las muchas que he tenido con niños sucedió con un miedoso niño de 4 años que se ponía nervioso mientras nadaba en la orilla del océano y corría frenéticamente con cada ola que lo envolvía. Yo comencé a hacerle tapping en el punto debajo del ojo mientras que su ansiedad bajaba visiblemente. Entonces fue al agua y se quedó, mientras se hacía tapping a sí mismo cuando una ola lo envolvía.

Después de las primeras olas, él fue capaz de parar de hacer tapping y nadar felizmente, solo ocasionalmente se hacía tapping a sí mismo cuando se acercaba una ola un poco mayor. Yo noté que este niño estaba menos nervioso después de esta experiencia, y recibí un dibujo de sí mismo en el agua con una cara triste y luego con una cara alegre, que decía “Gracias.”

Con aloha, Bobbie Sandoz

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Un bebé a punto de llorar

¡Hola Gary! Este es un instante pequeñito, pero la vida está llena de instantes pequeñitos…, por lo tanto aquí está esto:

Hace un mes (casi después del taller de EFT de Cleveland), yo estaba en el ascensor de un hotel grande y con mucho movimiento. Una familia entró y el padre dejó un carrito con un bebé en el piso. Yo miré hacia abajo. La cara del bebé estaba mojada, y parecía estar durmiendo. De repente, su cara se arrugó, de la manera que lo hacen antes de llorar. Yo hice un chequeo interno rápido (mi intención no es tener control sobre la conducta del bebé, y si el bebé necesita llorar para alertar a sus padres de que algo va mal, no voy a interferir con esto; pero parecía que el problema era el motor del ascensor que constantemente arrancaba y paraba).

Me invadió un sentido de que ‘Todos somos uno’ y la incomodidad del bebé se hizo mío.

Yo le abrí mi corazón a él y empecé a hacer tapping mental sobre él: Ce, LO, BO, Cl; por cualquier razón que sea no hice los otros puntos, pero estos puntos los hice tres veces, manteniendo mis ojos clavados en el bebé para ver si le causaba algún disturbio, en cuyo caso pararía. Pero momentos después que empecé, su cara empezó a relajarse nuevamente, y al mismo tiempo llegamos al primer piso, volvió al punto donde estaba y se relajó nuevamente, descansando confortablemente. Ocurrió tan rápido, relativamente, el padre nunca tuvo razones para mirar hacia abajo, al bebé otra vez. Por supuesto, yo no sé si lo que hice fue lo que marcó la diferencia, pero sospecho que sí. Creo que nunca he visto un niño que no llorara una vez que empezara a cambiar la expresión, sin intervención (ej. que la madre lo suba en brazos). No sé si fue el amor incondicional que le envié o el tapping que hizo la diferencia, pero yo no me imagino un tapping sin amor, y este no era un momento para “experimentar”, mi gol era aliviar el malestar.

Yo estuve atemorizada y agradecida de haber estado en el ascensor. Fue algo pequeño, y sin embargo aliviar la molestia, aunque menor, de otro ser no es una pequeñez. Todavía estoy lleno de gratitud por haber tenido el privilegio de poder interactuar con el desconocido bebé.

Catherine Light

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Dolor en una pierna rota

Hola Gary,

Cuando aprendí EFT siempre estaba ofreciendo hacer tapping en mis niños por varias razones. Ellos eran escépticos y me daban un rotundo “No, Mamá”. El pasado invierno mi hijo de 11 años se rompió una pierna esquiando. Después de esperar por más de una hora a que el fisioterapeuta, lo examinara y removiera la tablilla, yo le ofrecí nuevamente hacer tapping en él porque lo vi con mucho dolor. Al principio me dijo que “No”, y le dije “Lee, quizá te ayude.”

En su desesperación el aceptó. Poco tiempo después de empezar a hacer tapping él se relajó y parecía que el dolor había bajado. Después de esta experiencia lo mandaron a casa a esperar hasta el lunes cuando el quirófano estaría disponible. El tenía mucho menos dolor y me preguntaba por esta cosa que quitaba el dolor. El se volvió creyente.

Con los mejores deseos,

Deb Kennard

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Fricción entre profesor/ estudiante

Querido Gary,

¡Qué gran idea de tener una sesión especial para niños! Yo he estado esperando para compartir ideas con otros que están usando EFT en niños e ideas para hacer esto más aceptable. Aquí hay una historia exitosa.

YO trabajo en una residencia psiquiátrica para niños. Un día un profesor vino hacia mí y me dijo: “¡Haz algo con este niño… no puede regresar a la clase hasta que se tranquilice!” El profesor y el niño estaban obviamente furiosos uno con el otro y el aire estaba eléctrico con el estado de ánimo.

“Jasón” rápidamente me dijo que el profesor había sido “un cretino” y que lo odiaba. Pero no quería perder clases y accedió a hacer su tarea. Yo le mencioné que había estado aprendiendo una técnica muy simple y rara donde se hacía tapping en los meridianos de acupuntura para ayudar a calmarse. El niño accedió y dijo que le gustaría intentarlo.

Nosotros hicimos tapping en “¡Odio el cretino!” por una ronda. El se puso de pie y se hizo tapping en cada punto de su cuerpo y dijo que se sentía mucho mejor. Él todavía tenía un SUDs de 3. Entonces hicimos una ronda de tapping en “todavía estoy mal con el profesor.” Al terminar esta ronda dijo que se sentía perfectamente calmado y estaba listo para dialogar con el profesor.

Lo hicimos y él logró ser agradable, asertivo y calmado durante la discusión- a pesar de que el profesor estaba aún cargado de negatividad (yo le ofrecí después hacer tapping en él, pero no quiso). Jasón volvió a la escuela por las siguientes 4 horas sin ningún incidente.

Durante el tapping y mientras hablábamos, Jasón admitió que el profesor le recordó el fuerte control de su padre. Como yo no era su tutora no entré en el problema subyacente pero le sugerí que podía trabajar en esto más tarde con la misma técnica.

¡Qué regalo sería educar a los profesores en EFT y que ellos pudieran enseñarlo a los alumnos!

Bendiciones Gary, con amor Karen Ledger

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Estudiante contrariada

Gary,

Yo no he escrito antes, pero he estado disfrutando de vuestro sitio Web. Aprendí a hacer tapping de Charles Figley en un taller de Trauma y Pérdida hace tres años. Al poco tiempo probé tapping en una joven clienta. Creo que tenía diez años. Yo fui a su aula para llevarla a nuestra sesión. La maestra dijo que estaba muy contrariada, pero no sabía por qué. Yo nunca le encontré el porqué. Llevé a la niña envuelta en lágrimas a nuestro pequeño cuarto, pero ella no hablaba. Entonces le dije que quería hacer algo muy tonto con ella. Primero le dije que dibujara una línea en el pizarrón que representara cuán grandes eran sus angustiosos sentimientos. Entonces hicimos el procedimiento dos o tres veces. Al terminar ella estaba sonriendo y riéndose tontamente, y ni siquiera recordaba por qué estaba llorando. No he tenido la oportunidad de probarlo con niños desde entonces, pero ha sido de gran ayuda con mis clientes adultos. Gracias por toda la maravillosa información de vuestro sitio.

Alice Finnamore, L. Psic.

Traducido por Marisa Niticia