Una mujer está parada desnuda, viéndose en el espejo de la recámara. No le gusta lo que ve y le dice a su esposo, ‘Me siento horrible; me veo gorda y fea. Realmente necesita que me digas un cumplido.’
El esposo responde, ‘Tu ojos funcionan perfectamente.’
Y así empezó el pleito…
Autor desconocido